Al viejo estilo de gobiernos que recurren al acarreo para legitimar sus acciones, el sometimiento de los empleados de la administración pública para asistir al evento y el reconocimiento a un exalcalde sentenciado por atentar contra la libertad de expresión, el panista Antonio Trejo Valdepeña presentó el primer informe al frente del gobierno de Silao.

Fotografía del Gobierno Municipal de Silao

Las charolas de unicel con lonches, las botellas de agua de sabor y las bolsas con el nombre en grande del alcalde se repartieron entre los cientos de asistentes que llegaron al auditorio del Polideportivo Eucaliptos.

Funcionarios, comerciantes, líderes vecinales y ciudadanos llevados hasta el recinto tenían que hacer largas filas para quedar registrados. En el acceso principal se colocaron al menos 10 servidores públicos con computadoras para incorporar a una base de datos a cada asistente.

En el caso de comerciantes y ciudadanos en general, tenían que presentar su credencial de elector, mientras los servidores públicos capturaban sus datos en las computadoras, luego indicaban la zona en la que tenían que colocarse para escuchar al presidente municipal.

Fotografías Carmen Pizano

Con 30 minutos de retraso llegó el Ayuntamiento 2018-2021 al lugar para dar inicio con la sesión solemne en la que se presentarían los resultados del primer año de gobierno, pero previo al extenso video y el sendo discurso del presidente municipal, una comitiva recibió a los representantes estatales del Poder Ejecutivo y el Legislativo.

Un funcionario del gabinete ampliado de Diego Sinhue Rodríguez Vallejo fue el enviado al informe del municipio que concentra el desarrollo económico, pero que también tiene graves problemas de violencia aunque ahí se ubica el Sistema Estatal de Coordinación, Comando, Control, Cómputo e Inteligencia (C5i). Silao tiene también el Aeropuerto Internacional del Bajío y Puerto Interior. El representante fue Luis Ernesto Rojas Ávila, director de la Coordinadora de Fomento al Comercio Exterior (Cofoce).

La representación del Legislativo corrió a cargo de la diputada panista Martha Isabel Delgado Zárate, sin que el diputado del distrito, el perredista Isidoro Bazaldúa Lugo, se hiciera presente.

Obligados a asistir

A través de la dirección de Recursos Humanos del gobierno municipal de Silao, todos los servidores públicos de la administración municipal fueron obligados a asistir al primer informe de Antonio Trejo, y para constatar que estuvieron tenían que pasar a las mesas de registro que se ubicaron en la entrada.

La circular se envió el lunes 9 de septiembre, firmada por el director de Recursos Humanos, Luis Gregorio Maqueo Anguiano.

“Deberá asistir todo personal sin excepción y realizar el registro de su asistencia en las mesas de registro”, se puede leer en el documento.

Oficio enviado unos días antes del informe

Con los uniformes de cada área, los servidores públicos hacían fila para dejar, en la base de datos, que estuvieron presentes para llenar el auditorio con una capacidad aproximada de 1 mil personas.

Reaparece Solís Arzola

Las primeras filas del auditorio se destinaron para los invitados especiales, es decir, autoridades municipales, estatales y federales. Pero el invitado que llamó la atención fue Enrique Benjamín Solís Arzola, ex presidente municipal, sentenciado por ordenar la golpiza a la reportera Karla Silva en septiembre 2014, durante el trienio que estuvo al frente de la administración municipal.

Este sería su primer evento público, después de haber salido del Cereso en el que permaneció más de 16 meses al comprobarse que ordenó una agresión a la reportera, inconforme por las notas que esta publicaba.

Presentado por la maestra de ceremonias en su calidad de ex presidente municipal, Solís Arzola recibió un ligero aplauso de los asistentes.

El exalcalde en segunda fila de traje negro y corbata gris con negro

El último alcalde priista de Silao (2012-2015) fue detenido en marzo 2016, unos meses después de que terminó el trienio, y permaneció en el Cereso de Irapuato hasta julio 2017, cuando se declaró culpable de haber ordenado la golpiza a la reportera y la secretaria de la oficina de El Heraldo en Silao.

Solís Arzola aceptó que en septiembre 2014 ordenó “darle un susto” a la reportera, por lo que se le condenó a dos años de prisión. A través un juicio abreviado consiguió salir libre a los 16 meses de prisión y el resto de la condena en libertad.

Otros de los invitados al informe fueron el exalcalde panista Juan Tovar, la diputada federal Melanie Murillo, el legislador Fernando Torres Graciano y el dirigente panista Román Cifuentes.