Después de seis días de lucha, la comunidad estudiantil en el campus Guanajuato anunció que el paro se levanta este martes a las 07:00 horas, una vez que hayan hecho los trabajos de limpieza en las diferentes sedes que tiene la Universidad de Guanajuato en la capital del estado.

Tras la publicación del convenio en el Periódico Oficial del Gobierno del Estado y las disculpas públicas del rector y el gobernador por las omisiones para atender la violencia, la comunidad estudiantil reunida en el edificio central festejó el histórico suceso.

¡Abejas unidas, jamás serán vencidas! ¡Bravo, bravo, sí nos escucharon!, fueron las consignas que no se dejaban de escuchar, después de que se informara sobre la publicación del convenio en el Periódico Oficial del Gobierno del Estado, con la firma del gobernador, Diego Sinhue Rodríguez Vallejo; el secretario de Gobierno, Luis Ernesto Ayala Torres; el rector general, Luis Felipe Guerrero Agripino; y del alcalde de Guanajuato, Alejandro Navarro Saldaña.

El paro que inició el pasado miércoles desde las 05:30 horas para exigir paz, seguridad y aulas libres de acoso en la Universidad de Guanajuato, pero después se pronunciaron por una lucha en busca del cese de la violencia en todo el estado.

Luego de diversas convocatorias para que las autoridades escucharan en voz de la comunidad estudiantil los problemas de inseguridad y violencia, lograron reunir al secretario de gobierno, al rector, al fiscal general y al alcalde el sábado por la mañana. 12 horas después de manera individual emitieron comunicados comprometiéndose a cumplir con los compromisos que exigió el alumnado, pero fue hasta este lunes que las cuatro autoridades firmaron el convenio.

Para esta noche, la comunidad estudiantil convocó a los estudiantes a hacer los trabajos de limpieza, pero también a hacer un archivo de todos los carteles, mantas y demás expresiones de lucha.

Alrededor de las 18:00 horas de este martes, se confirmó la publicación del convenio en el periódico oficial, que formó parte de las exigencias de la comunidad estudiantil.

Sin embargo, en el resto de los campus no hay, hasta el momento, información oficial sobre el futuro del paro estudiantil.

Las medidas urgentes solicitadas por los manifestantes fueron dos: disculpa pública del gobernador y el rector, la segunda fue la destitución de Lourdes Gazol del programa UGénero; además, en el convenio se pidió la salida del profesor investigador Julio César Kala, primer académico denunciado publicamente por acoso.

Para dar seguimiento a los compromisos planteados en el convenio, la comunidad estudiantil conformará comités de transparencia.

Una disculpa obligada

Disculpa leída, falsa, deshonesta, laxa y alejada de las víctimas fue la impresión que dejó entre la comunidad estudiantil el discurso que por la mañana pronunció el rector general de la UG, Luis Felipe Guerrero Agripino.

Uno de los principales reclamos del alumnado fue que no destinó líneas de su discurso de alrededor de 20 minutos a mencionar a las víctimas, cuando el movimiento inició por la dignidad y la justicia de las abejas que ya no están.

En entrevista para POPLab, varios estudiantes compartieron sus impresiones después del evento público al que convocó el rector general en el Teatro Principal la mañana del lunes.

"No se siente sincero, pero tampoco puedes obligar a alguien a que te ofrezca una disculpa sincera si no le nace, realmente se cumplió hasta cierto punto el objetivo, no de la manera deseada".

Las críticas no solo fueron para el rector, también para el gobernador que optó por disculparse frente a autoridades durante una reunión del Consejo Estatal de Seguridad.

"Las dos disculpas son muy laxas, no tienen voluntad política para tomar una postura firme y clara, me llama mucho la atención que ninguno de los dos hace mención de los nombres de las víctimas, eso serviría mucho para darle dignidad a su memoria, para recordarlos con dignidad".

De manera anónima, estudiantes expresaron su sentir después de presenciar la disculpa del rector y del gobernador.

"Las autoridades no han dado una respuesta muy buena… (el movimiento) esperemos que valga la pena para el futuro".

Una disculpa deshonesta y leída fue la impresión que dejó en otros estudiantes el discurso de Luis Felipe Guerrero Agripino.

"Pudo haberse evitado el estar leyendo, creo que su forma de hablar no ha cambiado desde que se pone a dar discursos. No cambia su forma de hablar, hoy era un punto clave la forma en la que estaba hablando. Nadie la sintió sincera, simplemente fueron unas palabra diplomáticas más".