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12/14/2025
Kala fue encubierto, no exonerado

Kala fue encubierto, no exonerado

El primer caso de acoso sexual en la UG data de 2016 y fue conocido por la PDHEG; en éste, el actual Magistrado del Poder Judicial Gustavo Rodríguez Junquera torció el procedimiento para defender al agresor

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    Fue hace al menos 3 años que María Isabel Puente, hasta ese momento becaria de la Universidad de Guanajuato (UG) fue víctima de violencia sexual por parte de Julio César Kala, quien fungía como su supervisor. Todo sucedió en Aguascalientes durante un evento académico y como ha hecho público la misma Isabel, todo había sido una pesadilla, hasta hace una semana.

    Isabel intentó acudir a los mecanismos institucionales en la UG para denunciar el caso, pero sólo recibió el rechazo por lo que tuvo que acudir a la Procuraduría de Derechos Humanos del Estado de Guanajuato (PDHEG). No quisiera analizar en este espacio el proceso en el que Kala renunció a la UG, sino en la desviación del proceso y en las mentiras del entonces Procurador de Derechos Humanos, Gustavo Rodríguez Junquera.

    Dos años después de iniciada la queja y sólo hasta que el ministerio público de Aguascalientes determinó el no ejercicio de la acción penal en el caso, fue que la PDHEG emitió su documento conclusivo con 7 “recomendaciones” año y medio después de lo que establece su Reglamento. Incluso, tuvo que ser Raúl Montero de Alba, el nuevo ombudsman impuesto por Gustavo, el que tuvo que emitir la Recomendación, un texto de autoría del trío Rodríguez-Estrella-Aguirre.

    Sólo uno de estos señalamientos hace referencia al caso, los demás describen cómo debería ser el proceso de atención a víctimas y la investigación de casos sobre acoso y hostigamiento sexual. El colmo es cuando la PDHEG recomienda a la UG dar valor preponderante al dicho de la víctima y utilizar el estándar de “persona razonable” a la quejosa: algo que la misma Procuraduría no hizo con su Recomendación ya que prácticamente exculpa a Kala.

    Además de las violaciones al debido proceso en términos de la duración de la investigación hay irregularidades más graves: Gustavo Rodríguez Junquera ordenó a Luis Alberto Estrella y a Víctor Aguirre que respondieran en el proceso de investigación a nombre del mismísimo Kala. Así es, la PDHEG no sólo revictimizó a Isabel sino que alteró su mismo procedimiento para defender al agresor; Gustavo quiso proteger a la UG y la dañó más de lo que esperaba, no solamente legitimando la impunidad, sino que la llevó al mismo extremo en el que se encuentra ahora, un protocolo inútil que simula la acción institucional.

    Esta distorsión del quehacer de la PDHEG le valió a Gustavo el premio de ser nombrado meses después Secretario de Gobierno y ahora, después de unas “merecidas” vacaciones en las que usó su poder político litigando casos, ser designado en una “terna” como Magistrado del Poder Judicial. (Los únicos que votaron en su contra fueron de Morena).

    Después de estas irregularidades Gustavo debe renunciar.

    Estrella y Aguirre merecen una mención aparte, el primero deseaba ser Procurador, pero la agresión a la defensora Cinthia Ramírez en un espacio público dinamitó esa posibilidad, pero “premiaron” su obediencia nombrándolo Secretario General de la PDHEG, de nivel 15 a nivel 16 ganando 110 mil pesos mensuales; lo peor es que esta doble función de investigar y defender al mismo tiempo a agresores lo ha seguido haciendo con los municipios. Qué cinismo.

    Aguirre, quien, igual que Estrella debería ser investigado por el Órgano interno de control de la institución, fue nombrado Subprocurador de la Región A, pero no por su capacidad técnica, sino por “defender” a la UG. Vaya defensa.

    Si el Rector renuncia, es su responsabilidad por encubrir a Kala, pero es también responsabilidad de Gustavo, quien ahora ha llevado sus “cualidades” simuladoras al Poder Judicial.

    Kala no fue exonerado, fue encubierto.

    La única que nunca cesó en su lucha por la justicia para ella y para cientos de mujeres fue Isabel Puente, por ello, la colmena hizo justicia, dándole un gran abrazo. Y a todos los otros espero que les haya dado una gran lección. Gracias Marisa y gracias a Las Libres que la acompañaron.

    14 de diciembre de 2019, 21:55

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