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Claudia Sheinbaum y la agenda de medios
En su propuesta "100 pasos para la transformación", presentada al iniciar su campaña presidencial, la doctora Sheinbaum destacó la garantía de las libertades de expresión y prensa, así como el respeto a los derechos humanos. Además, prometió la simplificación y digitalización de trámites, continuando con el programa "Internet para Todos" y el lanzamiento de un nuevo satélite de comunicaciones.
La virtual presidenta electa, Claudia Sheinbaum, poco se ha referido a su agenda de medios de comunicación y las telecomunicaciones, no obstante la relevancia del tema en el movimiento de transformación que llevó a Andrés Manuel López Obrador a la presidencia, particularmente en cuanto a los objetivos estratégicos de democratizar el ecosistema mediático, combatir los oligopolios, establecer nuevas reglas de relación con los poderosos empresarios del sector y hacer frente a las intensas campañas de desinformación en su contra.
En la propuesta sus “100 pasos para la transformación”, que presentó el primero de marzo al comenzar su campaña por la presidencia, la doctora Sheimbaum sólo dijo que se garantizarán las libertades de expresión y de prensa, así como el respeto a los derechos humanos. También que habrá una simplificación y digitalización de los trámites, “la más importante de la historia de México”; que se dará continuidad al programa Internet para Todos y que se pondrá en órbita un nuevo satélite de comunicaciones.
En su “Proyecto de Nación 2024-2030”, que incorpora las propuestas de los “diálogos por la transformación”, que coordinó Juan Ramón de la Fuente en diversas ciudades del país, y de la Comisión Especial creada para elaborar dicho proyecto, lo relativo a los medios y las telecomunicaciones tampoco se desarrolla ampliamente, a pesar de lo que plantea el doctor Lorenzo Meyer en la introducción del documento:
“Desde su inicio, el viejo sistema autoritario fue diseñado para subordinar a los medios de información. En el pasado, cuando la izquierda era la oposición debió operar teniendo a la prensa, la radio y la televisión en contra. Hoy, cuando la izquierda está en el poder, la situación es la misma: los medios convencionales de comunicación están mayoritariamente en contra. En el contexto de la 4ª T al mando del corazón del aparato de gobierno, los poderes fácticos se han enfrentado abiertamente con el líder del movimiento y con enjundia lo hacen vía los medios de comunicación tradicionales”.
El mismo historiador Meyer se refiere a la conferencia matutina, “la mañanera”, del presidente López Obrador como una “forma novedosa y muy efectiva para contrarrestar el asedio sin precedentes al gobierno desde los medios” y que en el nuevo gobierno habrá que diseñar una fórmula que cumpla la misma función de “mantener un contacto informativo directo, sistemático y frecuente con la ciudadanía, especialmente con sus bases sociales para neutralizar la interpretación negativa concertada y cotidiana que inevitablemente se seguirá vertiendo contra la 4T”.
Sin embargo, tampoco se desglosan otras acciones precisas en este campo.
El rubro del abatimiento de la brecha digital es el que sí está más desarrollado en el documento. Incluso se esboza una “Política nacional de conectividad” que tiene la meta de que en el país exista una cobertura de red móvil en localidades que actualmente no cuentan con acceso a internet con servicios fijos, móvil 3G o superior y satelital, así como fortalecer el acceso a Internet gratuito en espacios públicos.
Este objetivo va de la mano con otra “Política Nacional de Simplificación y Digitalización”, que llevará a la creación de la Agencia de Transformación Digital y de una nueva Ley General de Simplificación y Digitalización, que hará mucho más ágiles los trámites de la ciudadanía en los diferentes órganos de gobierno. Será, así se establece, un modelo nacional de atención ciudadana.
Es probable que en las próximas semanas tendremos mayores definiciones sobre el segundo piso de la transformación en materia de medios y telecomunicaciones, tanto de la doctora Sheibaum, como de las y los integrantes de su equipo. Mientras ello ocurre, aquí algunos de los temas relevantes que podrían ser incorporados en la agenda:
Medios comunitarios e indígenas. Desde la oficina de comunicación social de la Presidencia y en congruencia con el nuevo proyecto de nación, este sexenio se promovió con la UNESCO una política pública para fortalecer a la radio indígena y comunitaria, en la que participaron todos los sectores vinculados con este servicio. Después de meses de trabajo se presentó la propuesta, pero no hubo continuidad en las acciones a seguir; por ejemplo, que se cumpla con la obligación de destinar al menos el uno por ciento de la publicidad del gobierno federal a estos medios. Hacer realidad esta espléndida y noble política debería ser una prioridad en el nuevo gobierno.
Medios públicos. Sin duda estos medios se fortalecieron en la administración del presidente López Obrador con más inversión en producción e infraestructura. Destacaron los casos del Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano (SPR) y Once TV, cuyas señales hoy pueden verse en más poblaciones del país. Su papel para contrarrestar las campañas de desinformación y fomentar la pluralidad e inclusión ha sido muy importante. El segundo piso de la transformación deberá incluir ahora un fortalecimiento de Canal 22, el IMER, Radio Educación y especialmente del sistema de radiodifusoras del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) por su contribución en la cultura y la preservación de las lenguas nacionales. Es cada vez más necesaria una legislación específica para los medios públicos.
Publicidad gubernamental. Factor clave de la relación entre el gobierno y los medios de comunicación se finca en los recursos que se destinan para difundir las campañas gubernamentales de salud o de educación. Como se sabe, en la administración que está por concluir se redujo drásticamente el presupuesto en este concepto y ello explica parte del enojo de los empresarios mediáticos con el presidente López Obrador. En el nuevo gobierno debería continuar esta política, acompañada de criterios más transparentes para la asignación equitativa de estos recursos públicos. Ya hay hasta sentencias al respecto que habría que atender.
Nueva ley de cine. En el área jurídica de Presidencia se encuentra en análisis la iniciativa de la nueva ley de cine, que es producto de una consulta con todos los sectores relacionados con esta actividad, y que busca entre otros objetivos fortalecer la producción y exhibición de las películas mexicanas en salas cinematográficas y las plataformas audiovisuales digitales. Esta iniciativa podría presentarse en el periodo que va del 1 al 30 de septiembre, pero si no es así, es indispensable que sea recuperada por el nuevo gobierno, por todos los beneficios que traerá para la cultura y el desarrollo económico del país.
Derechos de las audiencias. Tema ineludible en un cambio de régimen, combatido política, legal y mediáticamente por las más poderosas empresas de la radio y la televisión, los derechos de las audiencias requieren una tutela efectiva. Hay sentencias firmes que revierten la contrarreforma del PRI, el PAN y el Partido Verde en 2017, pero hasta ahora el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) sólo ha solicitado prórrogas al Poder Judicial para no cumplir con la sentencia de poner en vigencia o emitir nuevos lineamientos en defensa de las audiencias y en el Congreso extrañamente no han avanzado las iniciativas que han presentado legisladoras de Morena, para que se recupere lo previsto originalmente en la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión.
Hay otros temas de la agenda, como el futuro del IFT (la opinión que tenga la virtual presidenta electa sobre este órgano autónomo tendrá un peso importante), la obligada regulación de las plataformas digitales, el impulso de la producción nacional independiente, la política satelital (además de lanzar al espacio un nuevo satélite), la nueva ley de ciberseguridad e incluso sobre el papel de México frente a los desarrollos de la inteligencia artificial (IA), que deberían ser tomados en consideración en el proyecto de nación de la 4T. De lo contrario, las fuerzas del mercado seguirán estableciendo las reglas del juego en varios terrenos del campo mediático y de las telecomunicaciones (lo estamos viendo en la televisión de paga, en la telefonía móvil, en la exhibición cinematográfica, etc.), lo que afectará el proyecto del humanismo mexicano que ha buscado consolidar el movimiento que encabezó López Obrador y que dará continuidad Claudia Sheinbaum a partir del próximo 1º de octubre.
VIAJANDO POR EL ÉTER
Medios como Animal Político insisten que los medios públicos fueron parciales durante el pasado proceso electoral al favocer en cobertura a la candidata a la presidencia de la coaliación Juntos Haremos Historia. Las generalizaciones, sin embargo, no son correctas ni éticas y confunden a las audiencias. Veamos por ejemplo lo ocurrido con los espacios informativos del Instituto Mexicano de la Radio (IMER), que dirige Aleida Calleja: en el informe final de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL) para el INE, esta radio pública aparece con un tiempo ligeramente mayor a Xóchitl Gálvez (35.63%) comparado con el destinado a Claudia Sheinbaum (34.76%) y no tan lejano al otorgado a Jorge Maynez (29.61%). Es decir, faltó muy poco para una equidad casi perfecta. En cuanto a valoración hacia alguna de las candidaturas, sólo se registraron dos menciones, una positiva y otra negativa hacia el candidato de Movimiento Ciudadano. Solo dos frente a casi 700 piezas informativas. En materia de cobertura con perspectiva de género, el IMER también fue ejemplar, al igual que otros medios públicos… El Sistema Mexiquense de Medios Públicos lanzó al aire un programa de observación y análisis sobre los medios de comunicación, Obsmediamx, bajo la conducción de la periodista Verónica Veloz. La primera emisión fue este martes 2 de julio. Su periodicidad es semanal, a partir de las 18:00 horas, en las frecuencias de FM de Mexiquense Radio. Larga vida a proyectos que contribuyan al empoderamiento de las audiencias y al análisis crítico del quehacer de los medios tradicionales y digitales… Y ya que hablamos del proceso electoral, otro aporte significativo de los medios públicos lo llevó a cabo la televisora del Congreso de la Ciudad de México, Congreso TV, que encabeza Diego Saturno, con la producción de un documental denominado “¿Qué hay detrás del voto?”, en el que se analiza el sistema electoral mexicano y sus mecanismos para blindar la confianza ciudadana respecto al derecho del sufragio. Sus cuatro capítulos pueden disfrutarse en la página de Youtube de esta televisora pública: https://www.youtube.com/@congresotv21.2/videos
3 de julio de 2024, 04:22
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