Personal médico especialista y subespecialista denuncia que la dirección del Hospital General de Zona/Medicina Familiar No. 2 del IMSS Irapuato está siendo indiferente ante la emergencia sanitaria de la pandemia de COVID-19. Los titulares de la institución están dejando a su suerte al personal de salud, lo que dificulta la atención oportuna y de calidad a los pacientes de coronavirus en una de las ciudades de más concentración poblacional del Corredor Industrial del Bajío.

A través de documentación que hicieron llegar a POPLab para dar a conocer la situación al interior del nosocomio, el personal médico cuenta que "la indiferencia de los directivos es enorme. No les importa que tanta gente esté muriendo. El personal está desesperado".

Sólo después de León, en Irapuato se acumula la mayor cantidad de pacientes, que han ido en incremento desde que comenzó la pandemia en marzo. Al día de hoy la ciudad fresera tiene 2 mil 612 casos confirmados de COVID-19 y 139 fallecimientos; agregó 102 casos nuevos al total, así como 6 nuevas defunciones.

Foto: Gobierno de México

Esto quiere decir que la ciudad registró 4 enfermos nuevos cada hora en las últimas veinticuatro horas. Por otro lado, en un sólo mes el crecimiento de casos ha sido de 182.7% y el de fallecimientos 239%. De acuerdo con los testimonios del HGZ No. 2 IMSS Irapuato, sólo en esta unidad médica hay aproximadamente 60 pacientes hospitalizados en condiciones graves y muchos en estado crítico (intubación).

Los conflictos más apremiantes son la falta de involucramiento de los directivos y otras autoridades al interior del hospital, así como la inhumana sobrecarga de trabajo del cuerpo médico frente a la pandemia, que podría ser solucionada con la voluntad de quien representa a la institución.

Saturación hospitalaria y carencia intencionada de personal

Hasta hace unas semanas en el HGZ/MF No. 2 del IMSS Irapuato se contaba solo con el 5to piso para pacientes de COVID-19 y la capacidad era de 36 personas en cama como máximo. Tres semanas atrás se abrió el 4to piso con una capacidad similar. No obstante, "las hospitalizaciones se mantienen al alza cada día. Más o menos, calculamos 60 personas hospitalizadas. Y ahorita planean abrir un piso más", dicen las y los médicos.

"El gran problema es que por turno, de medicina interna, solamente a veces hay dos internistas, o a veces hay uno, y te mandan a un médico general de apoyo. La verdad es que ahí trabajamos como iguales, pero es imposible ver entre dos médicos a 60 pacientes".

Es bien sabido que a nivel nacional prevalece la falta de profesionales de la salud. Por un lado, una carencia de personal previo a la pandemia y, por otro, a causa de trabajadores en situación de vulnerabilidad, con comorbilidades, que han sido enviados a casa como medida de prevención; otros más han fallecido tras largas jornadas de exposición al virus.

Foto de portada: Correo

Sin embargo, según lo dicho por el personal médico del IMSS Irapuato, en su hospital hay una carencia de médicos internistas que obligó a incorporar personal de otras especialidades como Neurología, Cardiología, Nefrología, Geriatría, Dermatología y Psiquiatría. Pese a ello, y a causa del incremento de los pacientes, el personal existente ha sido incapaz de brindar una mejor atención a los derechohabientes.

"Se ha pedido en todos estos meses que cirujanos, ortopedistas se unan así como en la T1 o en la 58 allá en León. Acá ni anestesiología, ni terapia intensiva, ni urgencias. Entonces, trabajamos entre dos o tres para todos esos pacientes. Entonces sí es una brutalidad". "

El personal está mal distribuido entre las áreas covid y no-covid, siendo las áreas de la pandemia las más afectadas puesto que es ahí donde se concentra la carga de trabajo. Si no fuera por el personal de enfermería la atención no podría sostenerse, porque paradójicamente faltan médicos en donde más se necesitan. "Existen turnos en los que se vuelve muy mala la atención, pues no cuentan ni con ese apoyo de otras especialidades, es tan poco el personal, que se quedan muchos pacientes solos, nadie pasa a verlos, en varias horas o hasta días", explican.

Con preocupación insisten en que "se han muerto pacientes sin que se acerque a verlos nadie" por la falta de urgenciólogos o intensivistas, a pesar de que sí los hay en cantidades suficientes. Fincan responsabilidades, por ello, en las autoridades del hospital a quienes ya han acudido en distintas ocasiones por vías oficiales y no oficiales, puesto que si bien es un problema estructural en el sistema de salud, habría posibilidades de distribuir mejor al personal para enfrentar la pandemia.

Los Equipos de Respuesta COVID-19, según la normativa federal, se conforman de un líder médico y tres médicos de soporte. Debe haber 4 médicos para cada 24 pacientes. En el IMSS Irapuato hay 1 médico para 30 enfermos de coronavirus en cada turno.

Directivos ignoran la necesidad de auxilio

Aunado a lo anterior, el personal médico general contratado para el área de urgencias "no tienen la pericia suficiente y se les mueren pacientes porque ningún urgenciólogo entra a ver pacientes de coronavirus". Eso ha sido así —dicen— porque los urgenciólogos están protegidos por su jefa, la Dra. Ana Laura Vázquez Morones.

La falta de camas lleva a que haya pacientes esperando durante varias horas en la zona de triaje, una sala en la que con frecuencia se termina el oxígeno y el personal médico debe conectar a más de un paciente en un mismo tanque. Cuando llaman a las autoridades del hospital, estas tardan mucho tiempo en resolver los problemas.

Denuncian que el director del hospital Dr. José Octavio García Palafox, el Dr. Benjamín Merino Reyes, subdirector médico de la unidad, y la Dra. Alma Lilia Aguilar Gallardo, jefa de Medicina Interna en el hospital, no han atendido los reportes de las y los médicos respecto a la falta de personal y la "terrible situación" de los pacientes que están muriendo, pero que podría solucionarse: "Teniendo muchos médicos de otras especialidades, como Cirugía, Terapia Intensiva, Urgencias, y otras más, no toman las riendas de la situación para que se metan a ayudar", dicen.

"No atienden mensajes, ni llamadas. No contestan. Ellos son de lunes a viernes y van a su turno del hospital, y después de su salida ya no atienden a nadie. El resto 'pues échenle ustedes ganas', y al otro día 'uy, perdón es que no vimos los mensajes'."

De acuerdo con los testimonios, ningún directivo ha logrado que la organización de los espacios al interior del hospital sea eficiente para la atención de los enfermos. Lo mismo sucede con el equipo médico con el que se cuenta en el nosocomio, que está mal organizado y no se logra su eficiencia.

IMSS Irapuato. Foto: Especial

Médicos/as que ignoran la sobrecarga del área COVID

Las autoridades de la unidad médica no han sido capaces de incorporar a médicos con especialidad en el área quirúrgica, tales como cirujanos, anestesistas y traumatólogos. Pese a que se les ha llamado y tratado de que integren el equipo COVID como se estipula en los lineamientos oficiales de Equipos de Respuesta COVID-19, "encuentran la manera de zafarse, llegando tarde, alegando que a ellos no les corresponde ayudar, faltando, metiendo incapacidades, vacaciones, escudándose en pretextos tontos para no entrar al área COVID".

"En muchos otros hospitales del IMSS, es bien sabido que entran a ayudar cirujanos, ortopedistas, otorrinolaringólogos, pediatras, ginecólogos. En cambio aquí los jefes no logran hacer que se incorporen por lo menos intensivistas y urgenciólogos que son de los más capacitados para atender COVID".

Desde que comenzó la pandemia la cirugía programada está suspendida y sólo hay cirugía de urgencias. En condiciones "normales" en el hospital hay cinco anestesiólogos y cinco cirujanos. Pero durante la pandemia solo están operando uno o dos y aunque se les solicita su ayuda, la dirección no logra convencerlos de que suban a los pisos COVID, pero tampoco ha tenido el acercamiento necesario con los jefes de cada área médica.

El personal médico de consulta externa solo checa y se va a su consultorio. "Es una situación desgastante", dicen. Cuando se les cuestiona a los jefes, ponen trabas y responsabilizan al sindicato. Les dicen que los médicos "no quieren entrar, que no los pueden obligar".

"La sensación es que hay servicios como Terapia Intensiva que en todo lo que va de la pandemia no han visto un sólo paciente, hablando de pacientes covid. Ellos argumentan que tienen mucho trabajo, pero hay turnos en los que están dos médicos terapistas para dos pacientes. O sea, les toca de a un paciente por turno, y al mismo tiempo tienen dos médicos en el área covid y no nos pueden rolar a uno para que apoye. Nos da la impresión que protegen demasiado a algunos servicios, como es cirugía, como es anestesia, como es terapia intensiva. El no quererlos mover y no entendemos el por qué; si algún favor les deban".

Otra situación en la que el personal médico responsabiliza a los directivos Palafox, Merino y Aguilar es en la manera en la que se están presentando los informes a los familiares. Por disposición oficial el IMSS ofrece los informes a familiares por medio de una plataforma en línea o teléfono. Sin embargo, en el HGZ No. 2 de Irapuato han habido muchas quejas de que estos funcionan mal y, ante ello, los directivos no han atendido las solicitudes del personal de salud en las que piden un nuevo mecanismo para dar los informes.

Carencia de medicamentos y EPP

Los familiares están teniendo que comprar por su parte medicamentos básicos como enoxaparina que sirve para la atención a la COVID-19, "y ni eso pueden solicitar las autoridades en cantidad suficiente a la delegación", dicen, de la cual es responsable el Dr. Marco Antonio Hernández Carrillo.

"Los pacientes que tenemos intubados, que tienen que estar con sedante, con analgésico, cosas fuertes, a veces ni eso hay. Les mandamos un mensaje: 'jefe no hay, doctora Alma, doctor Merino'. Y no contestan; eso es desesperante, el sentirnos solos".

El equipo de protección personal es de mala calidad, incluso en ocasiones los cubrebocas están rotos a pesar de ser nuevos; como no hay botas desechables, se deben usar bolsas de plástico como sustituto. "Sabes que vas a llegar y hay mucha deficiencia de medicamentos, cosa que los directivos no quieren que digamos".

"Que se entere la población de Irapuato que la atención en el IMSS es ahora más deficiente que nunca, pues los jefes actuales, Dr. Benjamín Merino, Dra. Alma Aguilar, y el director, Dr. Octavio Palafox, no tienen la capacidad de enfrentar la situación actual, y organizar el hospital como es debido, haciendo que todos los doctores que trabajan ahí se agreguen a los equipos de COVID y ayuden a atender al enorme número de pacientes que hay y que cada día crece más. Urge respuesta de las autoridades por el bien de los derechohabientes. Está por demás mencionar que se hace esto en forma anónima pues se temen represalias y despidos al ventilar la situación".