El Estado no tiene el control del Centro de Readaptación Social (Cereso) Mil de Valle de Santiago, aunque busca ocultar lo evidente, los videos, el uso de celulares al interior, los enfrentamientos entre los internos que usan armas blancas convirtiéndose en los “amos”, mientras los directivos, policías estatales y custodios son espectadores para luego convertirse en verdugos.

Por su parte, la Procuraduría de los Derechos Humanos del Estado de Guanajuato (PDHEG), desde que se declaró en cuarentena por COVID-19, dejó de velar por los derechos de los ciudadanos que han sido violentados por autoridades y por esta misma institución.

El primer enfrentamiento del mes de mayo entre reos que presuntamente representan al Cártel Jalisco Nueva Generación contra internos que pertenecen al Cártel de Santa Rosa de Lima se registró en el Cereso de Valle de Santiago el jueves 08 a las 18:14 horas. La pelea por el control de la plaza, que por las agresiones de los custodios dejó varios heridos, entre ellos un hombre que fue lesionado en la cabeza y cuerpo con una punta, dañaron uno de los seis controles y parte del dormitorio 2, a donde intentaron ingresar.

Después de que los custodios presenciaban de lejos el enfrentamiento y sin revisar si iniciaron o no la trifulca, agarraron a los primeros internos que se encontraron, los formaron e hincaron en el pasillo del dormitorio y luego los golpearon hasta desmayar al menos a dos.

Foto: Cortesía.

¿Quién manda?

Alrededor de 200 reos de varios dormitorios intentaron ingresar la tarde del viernes al pasillo que lleva al dormitorio Dos, algunos tenían cubierto el rostro con tela blanca y negra, iban armados con palos, piedras y puntas.

Los pocos custodios que se encontraban se retiraron del lugar y otros, desde las cuatro torres de vigilancia del Cereso Mil, a lo lejos, solo observaron. Pasaron más de tres horas y nuevamente se limitaron a presenciaron el último de cuatro enfrentamientos en menos de 40 días.

Los presuntos seguidores del CJNG habrían buscado ingresar al dormitorio 2 para agredir a los seguidores de “El Marro”, José Antonio Yépez, específicamente en búsqueda de un sujeto apodado “el Latas” y de un segundo personaje, según la información a la pudo acceder POPLab. A su paso, la turba golpeó algunos reos, dañaron uno de los controles y parte del dormitorio 2, mientras los reos de ese dormitorio se aglomeraron tratando de evitar el ingreso.

Después de varias horas, la situación se calmó y elementos de las Fuerzas de Seguridad Pública del Estado y custodios finalmente ingresaron “para tomar el control”, hincaron a los reos que se iban encontrando y los golpearon por varios minutos, incluso hasta desmayarlos.

“Hicieron dos filas, a ellos los pusieron en el medio y los empezaron a golpear y a darles toques, los golpeaban los custodios… para calmarlos supuestamente, pero una cosa es calmarlos y otra golpearlos, por eso no permiten la entrada para que no los vea uno así”, coincidieron testimonios de familiares a este medio.

En los últimos dos años han sido asesinados 11 custodios del Cereso Mil de Valle de Santiago cuando salen de turno del penal, hecho que se atribuye a que no intercedan en las peleas entre los reos.

Las torres de la señal de teléfonos fueron cortadas desde el jueves, para evitar que los reos reportaran a sus familias lo sucedido, sin embargo, algunos lograron reportar la trifulca y la agresión de los policías estatales.

El Cereso mil de Valle de Santiago de nivel 5 de máxima seguridad, cuenta con bloqueadores de señal de telefonía para evitar que ingresen o salgan señales no autorizadas, pese a esto, en el video que circuló en las redes sociales los internos tienen celulares, reciben y hacen llamadas, tienen acceso a internet y datos. Aparatos que no podrían ingresar en las “aduanas inteligentes” con las que cuenta el centro penitenciario.

Foto: POPLab

“Guanajuato es para Guanajuato”

Aun con ello, un video de dos minutos con 3 segundos salió del interior del penal, aparato utilizado por los mismos reos, donde se difundió que los internos que intentaban ingresar a la fuerza a un dormitorio hacían destrozos mientras desde el interior de alguna celda la respuesta de los internos fue “Guanajuato para Guanajuato putos, Guanajuato para Guanajuato cabrones” gritaban. Ahí se evidenció lo que la autoridad ha negado, la ausencia de la misma al interior y que no tiene el control del Cereso Mil de Valle de Santiago y más bien se ha sometido.

El viernes por la tarde, ante lo evidente por la circulación de uno de los diversos videos de los celulares que usan los internos, se realizó un operativo de revisión a las 17:20 horas “porque la orden es encontrar el celular”, aparato que a decir de los familiares de algunos internos “no fue ingresado por ellos” ya que “nos encueran” y nos revisan hasta lo más profundo.

El mismo viernes personal de Teléfonos de México estuvo trabajando para arreglar la señal porque no había.

Familiares piden a la autoridad información, pero la niegan

Esposas, hermanas, madres y padres, al no tener información de sus familiares internos, acudieron al acceso principal del Cereso Mil de Valle de Santiago y solicitaron ingresar para saber de sus detenidos, pero les indicaron que si pasaban este viernes no podrían ingresar el domingo para la visita familiar porque solo se les permite una vez por semana por la alerta sanitaria ante la pandemia del COVID-19.

Solicitaron hablar con el director del penal, la respuesta fue que no estaba ni él ni nadie que les diera información. Los custodios les dijeron “que todo estaba bien, que todo está tranquilo, todo está normal y que sí hay líneas (de teléfono) conectadas”.

La desesperación llegó porque los internos desde el jueves hasta este viernes no se han comunicado con sus familiares por teléfono público como normalmente lo hacen, “no hay una llamada de ellos para saber que están seguros”.

Desde la alerta de salud por el COVID-19, los familiares denuncian que le han reducido a una visita por semana, ahora ya no pueden ingresar las familias, solo una persona por custodio y las visitas conyugales desde hace alrededor de un mes las suspendieron.

Para las 17:00 horas del mismo viernes, la Secretaría de Seguridad Pública del Estado ya había fijado una postura, obligada por el video que circuló. En un texto de cinco párrafos confirmó la pelea al interior del penal, misma que dejó solo 2 lesionados “leves que no ponen en riesgo su vida ni su salud, siendo atendidos de manera pronta y oportuna”, información que contrasta con lo expuesto por familiares de los internos que lograron reportar lo sucedido a sus familiares.

Incluso aseguraron que en ningún momento estuvo en riesgo la seguridad del Cereso porque el control y orden están en las manos de la autoridad y aseguran que restablecieron el control de manera inmediata, palabras que distan de lo que se vivió al interior, además del video, POPLab cuenta con una fotografía que evidencia la ausencia de la autoridad y las armas blancas que usaron reos para la riña.

Ilustración: Pinche Einnar

Derechos Humanos, ausente

Después de los primeros tres enfrentamientos, donde les han negado la información, los familiares acudieron a la oficina de Derechos Humanos del municipio de Irapuato para presentar una queja, pero no los atendieron y solo les dieron un número de teléfono al cual hablaron, pero les dijeron que no los podrían atender porque estaban en cuarentena.

“Hemos intentado con derechos humanos de Irapuato, pero ahorita con la contingencia que hay no hay acceso por el virus, ni hay quien nos dé una solución, una respuesta de lo que está pasando, hemos intentado denunciar, pero el único comunicado que tenemos es hágalo por teléfono, pero mañana o pasado”.

Tras las cuatro peleas, los accesos reducidos y la falta de información real de la autoridad, en las afueras del Cereso Mil, una esposa espera respuestas y poder ingresar para ver que su esposo esté bien de salud y le entregue los dos cuadros que hace para poder venderlos y así mantener a sus dos hijas menores de 6 años y un bebe de meses. Con ella se encuentran una docena de mujeres que al no saber de sus esposos, hermanos y padres esperan pacientes y solo observan cómo las camionetas de traslados, custodiadas por elementos de las Fuerzas del Estado, llevan algunos reos al Cereso de Salamanca.

“¿Eso es grandeza?”

Para David Saucedo, consultor y analista político, uno de los errores de la autoridad fue el de encarcelar a integrantes de cárteles rivales en el mismo penal y lo único que activó la Secretaría de Gobierno del estado es “una bomba de tiempo”.

El hecho que las autoridades han tratado de ocultar la existencia de riñas al interior del Cereso atribuyendo “falsamente” a la inconformidad de los internos por las medidas sanitarias, situación que se echa abajo con el video donde se aprecia “los internos no usan cubrebocas, no guardan la sana distancia y no están hacinados. Esta es la realidad del Cereso mil, el penal de alta seguridad del estado de Guanajuato y la joya de la corona del sistema penitenciario, ¿esto es grandeza?” explicó Saucedo.