Por Yajaira Gasca y Carmen Pizano
La nueva Legislatura arrancó en medio del conflicto, detonado por un supuesto error logístico, y se transformó en una protesta contra la falta de resultados del gobierno de Diego Sinhue Rodríguez Vallejo, quien, de manera insípida, se despidió de los guanajuatenses y agradeció por la oportunidad de servir a la ciudadanía.
La integración histórica del Poder Legislativo, con una mayoría de mujeres (19 frente a 17 hombres), se vio desdibujada por la conformación de la Junta de Gobierno, el principal órgano de gobierno del Congreso, en el que solo dos mujeres tendrán representación.
El choque entre las dos principales fuerzas políticas en el Congreso—Acción Nacional y Morena—anticipa un escenario de confrontación. Desde su primera sesión, el coordinador de los diputados morenistas, David Martínez Mendizábal, advirtió que la marginación y el maltrato por parte de los panistas constituyen el preámbulo de la ruptura del diálogo.
Surgieron reclamos contra el gobernador saliente, calificado por diputados de Morena y su militancia como un personaje corrupto. La postura inexpresiva de Diego y su discurso vacío no abonaron al clima de pugna con el que arranca la Legislatura más plural, en términos políticos, de los últimos años en el estado.
Mal inicio: anticipa ruptura del diálogo entre PAN y Morena
Un aparente error logístico se convirtió en un conflicto político durante la sesión de instalación del Congreso local, lo que anticipa la prematura ruptura del diálogo entre legisladores de Morena y del Partido Acción Nacional (PAN).
Personal del Congreso impidió el acceso al Pleno a familiares de tres representantes morenistas: Hades Aguilar Castillo, Plásida Calzada Velázquez y Ernesto Millán Soberanes. La denuncia sobre esta situación fue realizada por el coordinador del grupo parlamentario de Morena, David Martínez Mendizábal, quien interrumpió el protocolo de la reunión para pedir que no se continuara mientras no pudieran acceder las personas invitadas por los legisladores.
El presidente de la Mesa Directiva, el diputado panista Rolando Alcántar Rojas, aseguró que la situación se atendería e intentó continuar con la sesión, después de que el gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo y el presidente del Poder Judicial, Héctor Tinajero Muñoz, ya habían realizado sus intervenciones.
El coordinador morenista pidió al presidente de la Mesa Directiva que no continuara con la sesión. Él intentó reactivar el protocolo en al menos un par de ocasiones, lo que provocó la intervención de los legisladores afectados.
Hades Aguilar aseguró que a su familia se le informó que podría ingresar, mientras que Martínez Mendizábal sostuvo que se les preguntó de qué partido eran los invitados. En ese momento, advirtió sobre la posible ruptura del diálogo debido a la forma de actuar de los diputados panistas.
Otra legisladora morenista, Edith Moreno Valencia, también reclamó la falta de respeto hacia las familias de sus compañeros, y Ernesto Millán alzó la voz para reprochar la mala organización y el trato diferenciado hacia sus familiares.
Durante la discusión, la diputada Hades Aguilar aprovechó el micrófono para reclamar al gobernador saliente: “Diego, llegaste mal y te vas mal”. Con el micrófono cerrado, lo tachó de corrupto.
Esto provocó que simpatizantes panistas apoyaran a Diego con porras, mientras los morenistas replicaron los calificativos de corrupción y mal gobierno, y la situación de ingreso de los familiares de los legisladores no se resolvió. Finalmente, el presidente de la Mesa Directiva pudo retomar la sesión y usar el micrófono para emitir su posicionamiento por el arranque de la Legislatura.
En su discurso, el diputado panista llamó reiteradamente al diálogo y a la conciliación entre las fuerzas y representaciones políticas del Congreso local, reconociendo que la nueva Legislatura tiene una composición distinta a las anteriores.
El Congreso quedó conformado por cinco fracciones parlamentarias: PAN, Morena, PRI, Partido Verde y Movimiento Ciudadano, además de dos representaciones encabezadas por mujeres: una del Partido del Trabajo y otra del Partido de la Revolución Democrática (PRD).
“El Congreso del Estado debe ser sinónimo de pluralidad, tolerancia, apertura, consulta y escucha activa para generar consensos. Los tiempos han cambiado y hoy nos obligan a buscar una evolución en la manera de llegar a acuerdos y buscar consenso... los invito a que busquemos siempre la conciliación, antes que la confrontación”, subrayó el diputado.
El secretario general del Congreso, Christian Cruz Villegas, anunció en una entrevista posterior a la ceremonia de instalación de la Legislatura que se iniciará una investigación sobre el impedimento que sufrieron los familiares de legisladores para ingresar.
Evitó explicar qué personal fue responsable de estas acciones, pero aseguró que ofreció disculpas y que para el evento de protesta de la gobernadora electa se cambiará la logística para evitar conflictos.
Legislatura con más mujeres, pero las relegan de las coordinaciones
Por primera vez en Guanajuato, el Congreso del Estado queda conformado por más mujeres que varones: 19 diputadas y 17 diputados; sin embargo, los hombres conservaron las coordinaciones de los grupos parlamentarios y en la Junta de Gobierno y Coordinación Política, máximo órgano de gobierno, solo estarán presentes las representantes del PRD y el PT. Ellas no tienen una bancada qué coordinar, sino que son las únicas diputadas de esos partidos políticos.
Para los próximos tres años habrá siete fuerzas políticas: PAN, que cuenta con 16 representantes; Morena sumó 11 curules; el PRI tiene tres diputaciones: mientras PVEM, Movimiento Ciudadano tienen dos diputaciones cada uno. En el caso del PT se queda con la representación de Carolina León Medina, quien ganó la elección en el distrito XIII, y María del Pilar Gómez que ganó el distrito XX con la coalición PAN-PRI-PRD, decidió conservar la representación de éste último partido que ya perdió el registro nacional.
Las coordinaciones del PAN, Morena, PRI, PVEM y Movimiento Ciudadano se quedaron para los varones porque así lo decidieron las dirigencias de los partidos políticos.
La Junta de Gobierno y Coordinación Política se va a integrar por el panista Jorge Espadas, el morenista David Martínez, el priista Alejandro Arias, el emecista Rodrigo González, Sergio Contreras como representante del PVEM, y las dos diputadas que tienen la representación del PT y el PRD.
Es en la Junta de Gobierno y Coordinación Política donde se pactan los acuerdos, se hacen nombramientos, se reparten los recursos económicos. De manera general, se toman los principales acuerdos para el funcionamiento de la Legislatura.
En el Congreso de Guanajuato hay rezagos históricos en el reconocimiento de los derechos de las mujeres y otras poblaciones consideradas vulnerables. En el caso de la agenda feminista, se ha postergado desde hace al menos tres legislaturas la eliminación del delito de aborto del Código Penal.
A pesar de que desde septiembre de 2021 la Suprema Corte de Justicia de la Nación sentó un precedente al declarar inconstitucional el tipo penal de aborto, en Guanajuato existe una resistencia a eliminar el delito del Código Penal local con el argumento de que existe una disposición constitucional que reconoce la vida desde el momento de la concepción y hasta la muerte natural.
Por la resolución de la SCJN ninguna mujer podría estar presa por abortar, pero en Guanajuato se conserva el tipo penal por la resistencia que mostró el PAN a través de la ahora diputada federal, Cristina Márquez Alcalá, quien durante seis años presidió la comisión de Justicia desde donde también frenó reformas en favor de la comunidad LGBT.
Invisibiliza PAN representación LGBT
La integración de la nueva Legislatura no solo se distingue por la mayoría de mujeres, sino porque por primera ocasión se han incorporado perfiles que representan grupos de población históricamente marginados como personas con discapacidad, pueblos y comunidades indígenas, migrantes y de la comunidad LGBT.
Sin embargo, es a este último grupo poblacional que el PAN insiste en invisibilizar, no solo evitando el reconocimiento de derechos desde la legislación, sino al nombrar a quienes hoy tienen una curul como representantes de la cuota establecida para la comunidad de la diversidad sexual.
En el discurso de inicio de la Legislatura, el presidente de la mesa directiva, el panista Rolando Alcántar Rojas, distinguió la representación de los pueblos y comunidades indígenas con la diputada morenista Plásida Calzada, a la comunidad migrante con la panista Yesenia Rojas, y a las personas con discapacidad con la integración de Jesús Hernández, también por el PAN.
"Frente a Guanajuato asumo con humildad y responsabilidad la encomienda institucional de trabajar con pluralidad, imparcialidad, pulcritud, rigor, y por supuesto, respeto, por cada voz en este pleno", prometió Rolando Alcántar.
A quienes no mencionó el presidente de la mesa directiva fue a las personas que llegaron al Congreso de Guanajuato postuladas como integrantes de la comunidad de la diversidad sexual. Se trata de su compañero de bancada y actual dirigente estatal del PAN, Aldo Márquez Becerra, y de la diputada de Morena, María Eugenia García Oliveros.
La omisión del diputado panista provocó que la diputada de Morena solicitara la palabra en medio del discurso, pero Rolando Alcántar pidió a su compañera que le permitiera terminar.
Apenas dejó de hablar el presidente de la mesa directiva, la diputada María Eugenia García prendió su micrófono para recordar que en el Pleno había representación de la comunidad LGBT.
"Quiero hacer uso de la voz porque hace unos momentos se nombró a varios sectores y se dejó a un lado a la comunidad LGBT a la que vengo representando, soy la voz en el Congreso de todos aquellos y no quiero que se les deje fuera, quiero que se les mencione porque es un sector muy importante. Vamos a legislar para todos y para todas, y no nos podemos dejar fuera", señaló la diputada de Morena y al terminar recibió aplausos del resto de diputadas y diputados, excepto del PAN.
En el Congreso de Guanajuato hay al menos una docena de iniciativas relacionadas con el reconocimiento de los derechos de la comunidad de la diversidad sexual que no han sido atendidas sobre diversos temas como el matrimonio igualitario, la prohibición de las llamadas Ecosig o "terapias de conversión", facilitar los trámites para la identidad de género, entre otros aspectos.
Diego, un adiós vacío y por la puerta de atrás
En su última aparición pública, el gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo decidió hablar de renovación, los retos del futuro y del que él consideró el mayor de sus desafíos: la pandemia por el Covid-19.
En un discurso de apenas cuatro minutos y medio, que representó su despedida, evitó hablar de la violencia que hereda a su sucesora, la gobernadora electa, Libia Dennise García Muñoz Ledo, así como de los pendientes en materia ambiental y de agua. Tampoco respondió a los señalamientos de corrupción que le reclamaron allí mismo, en el salón de Pleno.
“El inicio de funciones de la Sexagésima Sexta Legislatura coincide en el calendario con el último día de mi gestión como gobernador del estado y, siendo este el último evento al que asisto en calidad de gobernador, quiero hacer público mi agradecimiento al pueblo de Guanajuato por la oportunidad y el privilegio con el que me honraron de servirles”, señaló, anticipando de esta manera su posible ausencia en la toma de protesta de la gobernadora electa, emanada de su partido.
Sostuvo que su gestión fue un período intenso porque se vivieron hechos inimaginables, como la pandemia del siglo. “Pero estamos de pie”, dijo, “gracias al trabajo conjunto de sociedad y gobierno”.
No hizo más referencias a los resultados de su gobierno en materia de seguridad, medio ambiente o salud, guardó silencio sobre las miles de víctimas de homicidios dolosos que se acumularon durante los seis años que fue gobernador, ni sobre la crisis de adicciones que deja a Guanajuato, o el incremento en la desigualdad que afecta a las familias más vulnerables. Evitó la autocrítica y la posibilidad de ofrecer a los guanajuatenses una disculpa por las fallas de su gobierno.
En lugar de eso, pidió ver hacia adelante, hacia el futuro, para que Guanajuato siga siendo punta de lanza en materia industrial, a pesar de que esta industria viole los derechos de sus trabajadores, explote los recursos de la entidad y contamine su territorio.
“Sigamos siendo cuna del desarrollo de nuestro país. Ahora dejemos el espacio a quienes vienen a renovar nuestras instituciones, como lo es esta nueva Legislatura”, agregó.
Rodríguez Vallejo también hizo un llamado al diálogo y a los consensos, consciente de que la nueva conformación del Poder Legislativo le impedirá a Acción Nacional, su partido, avasallar con la mayoría como lo hizo en legislaturas anteriores.
“Es cierto que aquí conviven diferentes visiones, pero cuando se privilegia el interés superior del ciudadano y el beneficio común de la sociedad, es factible encontrar las coincidencias que permitan alcanzar los acuerdos en favor de la comunidad”, enfatizó.
Visiblemente incómodo, Diego tuvo que enfrentar abucheos y rechiflas de morenistas presentes en el Pleno del Congreso local. Se llevó reclamos de corrupción y malos resultados, que no quiso refutar.
Al concluir la toma de protesta de los nuevos diputados, el gobernador se fue por la puerta de atrás, saliendo por el elevador del Congreso hasta el estacionamiento del edificio. Decidió evitar al público y a los medios de comunicación, se fue en silencio y sin nada más que agregar.
25 de septiembre de 2024, 13:45
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