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12/5/2025
DÍAS DE GUARDAR Domingo 6 de octubre de 2024

DÍAS DE GUARDAR Domingo 6 de octubre de 2024

*Libia Dennise: seguridad es el nombre del juego; Tres largos meses para la partida de Zamarripa; *IDEA Gto: el segundo aire de Juan Antonio Reus

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    1.- Guanajuato se incendia en el cambio de gobierno

    No parece casualidad ni coincidencia. Al relevo en el gobierno estatal y el consecuente cambio en la Secretaría de Seguridad y Paz, a cargo de Juan Mauro González, la violencia se disparó en Guanajuato.

    Del 26 de septiembre al pasado viernes 4 de octubre, Guanajuato sufrió 120 homicidios dolosos registrados en el reporte diario de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana del gobierno federal. El promedio de asesinatos se ha elevado a 13 en estos primeros 9 días del sexenio, lo que representa el doble de la cifra entre enero y agosto de 2024, de 6.8 homicidios por día.

    Ni siquiera Sinaloa, con su guerra de cárteles publicitada a nivel mundial, se nos acerca, pues en los mismos 9 días acumularon 57 homicidios y solo un día, el viernes 4 de octubre, superaron a Guanajuato en muertes violentas.

    Sin embargo, la reacción del estado norteño ha sido muy distinta a la que vemos cotidianamente en Guanajuato. Mientras allá se han unido organizaciones de la sociedad, sector privado, medios de comunicación y ciudadanos para reclamar un alto a la violencia y demandar la intervención de los tres niveles de gobierno, aquí hay una pasividad y desidia totales.

    En Guanajuato la violencia se ha aposentado y normalizado. Los medios de comunicación la trivializan, encontrando hasta motivos jocosos y titulares “ocurrentes” para utilizar cada hecho sangriento como gancho de venta. El sector privado permanece callado, como quien oye llover y los ciudadanos parecen resignados a su suerte.

    Sin embargo, este repunte de la violencia no puede ser ignorado, pues podría estar relacionado con una desestabilización originada en los cambios políticos que ya ocurrieron y los que están por venir.

    Además de la gubernatura y la secretaría de seguridad, esta semana hay relevos de alcaldes y vendrán en cadena los de las direcciones de seguridad de los municipios. Más allá, en el horizonte, está la sustitución del fiscal general del estado.

    ¿Podría estar relacionado el pico de violencia de los últimos días, con estos cambios? No puede descartarse y sería sano un mensaje de parte de las nuevas autoridades, particularmente la gobernadora Libia Dennise García Muñoz Ledo, que comparta con la población cómo se enfrentará el desafío.

    Ya el nuevo secretario de Seguridad y Paz anunció convocatorias para crear comisarías regionales de las Fuerzas de Seguridad Pública Estatales, así como la nueva policía investigadora. Es una respuesta rápida al persistente reto de la inseguridad en el estado, pero se tardará aún como un esfuerzo operativo.

    De cualquier manera, no deja de ser encomiable que mientras la mayoría de los nuevos secretarios aún andan buscando la ubicación de sus oficinas en los mapas de Google, Mauro González ya está preparando cambios en la anquilosada estructura que recibió de Alvar Cabeza de Vaca.

    La operatividad, muy necesaria, no puede ocurrir en ausencia de comunicación hacia la sociedad, algo de lo que ha adolecido de forma sistemática la política de seguridad en los últimos dos sexenios.

    La gobernadora es muy efectiva en sus redes sociales para informar de su agenda y sus actividades. No estaría por demás que en el delicado tema de la seguridad y ante esta ola de violencia, mande mensajes que orienten a sus gobernados.

    2.- Zamarripa, una lenta marcha

    La permanencia de Carlos Zamarripa en los 3 primeros meses del nuevo gobierno se explica más por las dificultades para encontrar a su sucesor, que por las escasas ganas que tiene de abandonar la rentable posición de poder de la que habrá disfrutado casi por 16 años, en el momento de su renuncia.

    En lo que resta del 2024 será difícil iniciar una estrategia efectiva de combate a la impunidad, freno a la inseguridad y recuperación de la paz, pues en todos esos objetivos el papel de la fiscalía es de primera importancia.

    Por otra parte, será difícil exigirle al funcionario que extreme sus esfuerzos cuando prácticamente está haciendo maletas y tramitando su jubilación.

    Al final del día, el nuevo comienzo se ha tomado su tiempo con calma y los casi cuatro meses transcurridos durante el interregno entre la elección y la toma de posesión, no parecen haber servido para el trabajo de búsqueda de perfiles y cabildeo necesario para la elección del nuevo fiscal.

    Si hay una área en la que resultaba importante mandar señales oportunas a la vez que contundentes, es la de la procuración de justicia, donde se enquistó una camarilla que nunca atendió la evolución delictiva de Guanajuato, que se especializó en simular y en atender discrecionalmente el reclamo social de alto a la impunidad.

    Son tres meses que serán prácticamente perdidos al interior de la Fiscalía General del Estado, donde campean la preocupación, la incertidumbre y la desmoralización entre el personal de base.

    Por cierto, esta semana Zamarripa vertió declaraciones de prensa en un encuentro regional de fiscales estatales, en Aguascalientes, donde repitió su vieja tesis de que él no tiene la culpa de la alta incidencia delictiva, ya que su trabajo no es la prevención.

    Con una paciencia con la que no suele tratar a la fuente periodística de su dependencia, ante los periodistas del estado vecino, insistió en ese mantra que no logra engañar a nadie: Zamarripa se irá sin haber aceptado nunca que el mayor abono al crecimiento de la delincuencia en Guanajuato fue su alta ineficiencia para perseguir los delitos.

    3.- Juan Antonio Reus, horas extras

    Al no encontrar a una mujer que aceptara dirigir el organismo de Innovación IDEA Gto, Libia Dennise García se vio obligada a ratificar a José Antonio Reus Montaño, pese a las múltiples quejas en contra de su gestión, por dispendio de recursos, por asignaciones dirigidas de fondos y por el hecho de que funcionarios bajo su cargo se hayan aprovechado de esos apoyos con fines personales.

    Reus parece decidido a la enmienda, por lo pronto ya se da una limpia de algunos de los colaboradores desleales, la cual no ha sido comunicada oficialmente, por lo que tampoco abona mucho a lavar su imagen.

    Lo que se ve difícil, sin embargo, es que obtenga la misma cantidad de recursos que le asignaba Diego Sinhue Rodríguez, por darle cuerpo a una de sus políticas de propaganda más exitosas, pues la Mentefactura nunca fue más allá de eso.

    Con una nueva visión en la SEG y en Economía y sin el manto protector de los hermanos Márquez Becerra y de Juan Carlos Alcántara, el horizonte del futurólogo de bolsillo del exgobernador, no parece muy promisorio.

    5 de octubre de 2024, 14:55

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