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12/5/2025
“No hay manual para dirigir la Universidad”, se justifica Agripino frente a protesta de alumnos en su último informe

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“No hay manual para dirigir la Universidad”, se justifica Agripino frente a protesta de alumnos en su último informe

Grupo de alumnos realiza contra informe para reclamar incumplimiento de acuerdos logrados en paro estudiantil; logran ingresar pese a bloqueo de seguridad y funcionarios

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    Por Yajaira Gasca y Carmen Pizano

    Envuelto en polémicas por temas como el acoso sexual en las aulas, el descenso del nivel académico y acusaciones de intervencionismo en el proceso de su propia sucesión, el rector general de la Universidad de Guanajuato, Luis Felipe Guerrero Agripino, rindió su octavo y último informe en el que reconoció errores y excesos, que justificó con el argumento de que todo lo hizo pensando en el bien de la casa de estudios.

    "Mis defectos y mis excesos han sido pensando en el bien común de la comunidad universitaria que represento. Si en esos excesos, si en esos defectos me equivoqué, ofrezco una sentida disculpa".

    Actualmente, Guerrero Agripino enfrenta un proceso penal por allanar, junto a otros directivos, las instalaciones del periódico Correo. En los próximos días se realizará la audiencia inicial para que un juez determine la situación legal del rector general y compañía.

    Ante un auditorio abarrotado por invitados especiales, alumnos “transportados”, personal de la institución y la irrupción de un grupo de estudiantes que protestaron, pese a que se les obstaculizó la entrada al auditorio del estado, Guerrero Agripino se despidió de la rectoría general con la promesa de no buscar otro cargo directivo en la UG y tampoco un cargo de elección popular en las elecciones del próximo año.

    Luis Felipe Guerrero proyectó su futuro en el ámbito académico y adelantó que renunciará al salario como rector general por otros dos años, como está establecido en el estatuto universitario que fue reformado estando él al frente de la UG.

    Imágenes de Yajaira Gasca y Carmen Pizano
    Imágenes de Yajaira Gasca y Carmen Pizano

    El rector habló en su discurso de apertura a todas las expresiones, pero se negó a escuchar al grupo de estudiantes inconformes que llegaron a reclamar el incumplimiento de los acuerdos tomados en 2019, con los que se dio fin al paro estudiantil, la movilización más grande de esta comunidad hasta la fecha.

    En reiteradas ocasiones el grupo de manifestantes fue retenido por autoridades universitarias, siempre acompañado de la defensora de los derechos humanos en el entorno universitario, Margarita López Maciel, quien no hacía más que regañar a los alumnos mientras los llamaba a guardar el orden.

    Cuando finalmente pudieron ingresar al auditorio, confiaron en la promesa que les hizo el rector de escuchar sus expresiones al término de su discurso. Pero cuando terminó de hablar, bajó del escenario y la maestra de ceremonias impidió que los estudiantes hablaran.

    Entre disculpas y agradecimientos, concluye la era Agripino

    El discurso de despedida de Luis Felipe Guerrero Agripino como rector general de la Universidad de Guanajuato, fue una constante disculpa por errores y desaciertos cometidos a lo largo de ocho años al frente de la máxima casa de estudios.

    Después de un largo video de más de una hora en el que se presentaron resultados resultados alcanzados por la institución, Guerrero Agripino tomó la palabra 20 minutos más para brindar agradecimientos y disculparse por los errores cometidos como el representante de la universidad.

    “En este trayecto, con todos mis yerros, con todos mis desaciertos, tengo claridad en algo, juro que tengo claridad en eso: jamás nada que vaya por encima del bien de mi querida universidad, incluso mis defectos y mis excesos han sido pensando en el bien común de la comunidad universitaria a la que represento”, expresó frente a los asistentes al informe 2022-2023.

    Alumnos de primer ingreso, profesores, funcionarios universitarios y de la administración estatal, diputados y magistrados, fueron los invitados que ocuparon el Auditorio del Estado para escuchar el mensaje del rector general.

    El gran ausente fue el gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo, quien en su representación envió al secretario de Educación, Jorge Hernández Meza para que ofreciera un mensaje a la comunidad universitaria.

    También resaltó la ausencia de los rectores de los campus León, Guanajuato e Irapuato: Carlos Hidalgo, Teresita de Jesús Rendón Huerta y Armando Gallegos, ahora todos ellos candidatos a la rectoría general. La única rectora presente fue Graciela Ruiz, del Campus Celaya-Salvatierra, actualmente presidenta de la Comisión Especial para la designación de la persona titular de la Rectoría.

    La disidencia estudiantil ocupó un lugar en la parte alta del teatro, tras verse frenados a ingresar por personal de seguridad de la institución.

    Con voz suplicante, el rector general les pidió permitirle dar su mensaje y prometió escuchar después sus reclamos.

    “En el camino sucedieron situaciones adversas, sí, porque finalmente la universidad no es un ente aislado de la sociedad; la universidad es un organismo vivo, cambiante, diverso, si cada persona es un mundo en la universidad hay más de 50 mil personas con mundos diferentes y con percepciones distintas de la vida y de la realidad”.

    “No existen manuales para dirigir una universidad, yo soy como tantos casos un profesor universitario que tuvo el privilegio de ser rector general, jamás me atrevería a dar consejos técnicos, metodológicos de cómo hacerlo…uno asume un cargo con su experiencia, con su proyecto, con toda la carga de defectos que uno tiene”, recalcó.

    Los resultados sobre aumento de matrícula, plantilla de profesores de tiempo completo, becas, internacionalización y reformas al sistema de pensiones universitarias se detallaron en el largo video.

    Si acaso, Agripino sólo se detuvo a resaltar el incremento de matrícula que en el acumulado de 8 años llegó al 30%, al pasar de 36 mil 569 estudiantes a 47 mil 108. El resultado implica mil 317 alumnos cada año ó 3% de crecimiento anual.

    Agradeció al gobierno federal por un apoyo económico puntual y permanente y también mencionó el respaldo del gobierno del Estado, con Miguel Márquez Márquez en su primer período como rector general y luego con el gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo en su segunda etapa.

    “La universidad es un proyecto de estado, no de gobierno. La universidad es un proyecto de estado porque está para servirle a la sociedad, no para servirse de ella, por eso es universidad de Guanajuato, no Guanajuato de la universidad y el Gobierno está para apoyar a la universidad pública”, refirió.

    Hizo alusiones previas a la autonomía universitaria y al respeto de todas las opiniones y corrientes del pensamiento, aunque previo a la presentación de su informe se bloqueó el acceso a la disidencia universitaria.

    “...Aquí en la universidad son bienvenidas todas las ideas, pero jamás, jamás habrá espacio para intereses particulares, ni de sectores, ni de grupo;lo reitero, la universidad es una casa común, patrimonio de todos y todas, pero propiedad de nadie”.

    Ni candidatura ni compensaciones, rector asegura vuelta a vida académica

    A 42 días de culminar su periodo como rector general, Agripino anunció su plan de volver a la vida académica, “como un universitario libre” anunció antes de cerrar su discurso.

    En entrevista posterior, reiteró su plan de volver al trabajo docente en el que dijo tiene 26 años de experiencia y negó de manera tajante que tenga intención de contender por algún cargo de elección popular.

    “No soy candidato a nada y no voy a ser candidato a nada, eso es absolutamente falso y así lo digo categóricamente”, de esta manera también rechazó el supuesto acercamiento que ha tenido con el partido Morena.

    Además negó que tenga la intención de seguir recibiendo el salario que como rector general ha tenido en los últimos años, establecido como un derecho en reglamentos universitarios.

    Aseguró que la disposición fue establecida desde los años 90 en la legislación universitaria y que no fue en sus períodos como rector cuando se implementó. También dijo que no ha escalado cargos académicos durante su encargo, pues esta posibilidad sí se eliminó de la normatividad orgánica en su período.

    Dijo que como académico, estaría dispuesto a participar en una discusión sobre la modificación de las normas en la designación de la rectoría general, de forma seria, profunda y consensuada, “pero con diálogo, con grilla no le entro”.

    Sobre los puntos no resueltos del pliego petitorio por el paro estudiantil de 2019 y la inconformidad de estudiantes que acudieron a protestar al informe 2022-2023, dijo estar dispuesto a la escucha, pero en momentos factibles.

    “Yo creo que no era el momento, el diálogo y la escucha debe tener momentos específicos, este no era el momento. Yo recibo a los estudiantes en el momento que me lo soliciten, desde luego en momentos como éste no era factible establecer un diálogo aquí en un evento que tiene otras características”.

    Encapsula UG protesta estudiantil

    Con un contra informe en mano, pancartas, un megáfono y una serie de exigencias acompañaron a un grupo de estudiantes de la Universidad de Guanajuato que llegaron hasta el auditorio del Estado, recinto que desde las 10 de la mañana del miércoles era ocupado por estudiantes de nuevo ingreso movilizados por autoridades y profesores de la universidad para escuchar a Luis Felipe Guerrero Agripino para el que sería su último mensaje como rector general.

    "La verdad no nos hace libres, nos hace perseguidos", expresaron los estudiantes desde el inicio de la protesta afuera del auditorio, mientras que sus consignas pretendían ser opacadas por la estudiantina que tocaba para recibir a las personas invitadas especiales y los cientos de alumnos que eran trasladados en camiones y camionetas para luego recibir una playera y el lunch.

    Minutos después de las 11 de la mañana llegó el grupo de estudiantes para exhibir el contra informe del "Agripinato", los ocho años de Guerrero Agripino al frente de la Rectoría General, donde destacaron que las exigencias del paro de 2019 siguen sin ser atendidas: procesos reales contra violentadores sin revictimización ni persecución. Además pidieron a Luis Felipe Guerrero sacar las manos de la elección para la Rectoría General.

    En el contra informe, los estudiantes hablaron de simulación en los procesos contra violentadores en la UG, y como ejemplo aseguraron que Julio César Kala sigue en la nómina de la Universidad, aunque despacha en la sede de Valenciana. La salida de Kala de la UG fue uno de los acuerdos con la comunidad estudiantil en 2019 para terminar con el paro.

    También dijeron que quienes hacen denuncias de violaciones a sus derechos humanos se convierten en blanco de intimidaciones y se les niega el acceso a becas.

    "Vale más una beca para que un estudiante pueda estudiar que todos sus actos y ceremonias solemnes", gritaron afuera de un auditorio que aguardaba con varias mesas montadas con bocadillos y copas de vino llenas, listas para brindar con Luis Felipe Guerrero.

    El rector general llegó minutos antes del mediodía flanqueado por varias personas, lo que hizo que no pasara desapercibido por los estudiantes que protestaban, pero cuando quisieron entrar detrás de él, las puertas se cerraron, incluso uno de los estudiantes permaneció entre las puertas para evitar que cerraran por completo el paso.

    Momentos de tensión se vivieron cuando quisieron abrir las puertas de un recinto público que era sede del informe de actividades del rector de una universidad pública.

    Hasta la puerta llegó la defensora de los Derechos Humanos en el Entorno Universitario, Margarita López Maciel, y después de varios minutos de tensión accedió a abrir la puerta de ingreso al auditorio, pero les prohibió pasar las primeras escaleras, alegando que los "derechos humanos tienen límites".

    Tras varios intentos por entrar al auditorio porque los accesos quedaron resguardados por personal de seguridad, incluso por la secretaria particular de Guerrero Agripino, Dolores Gallegos Robles, por la parte superior del auditorio lograron entrar.

    Dolores Gallegos, secretaria particular de Guerrero Agripino de saco café, detrás de elementos de seguridad para impedir el acceso de estudiantes
    Dolores Gallegos, secretaria particular de Guerrero Agripino de saco café, detrás de elementos de seguridad para impedir el acceso de estudiantes

    Durante los más de 30 minutos de encontronazo entre autoridades universitarias y el grupo de estudiantes, el papel que jugó la defensora de los derechos humanos en el entorno universitario fue el de una profesora que hablaba a algunos estudiantes por su nombre y los regañaba por intentar hacer uso de su derecho a la protesta.

    Margarita López corría de una puerta a otra intentando frenar la protesta estudiantil, les pedía no ser violentos y seguía con las promesas de buscar sitio para el grupo dentro del auditorio.

    Finalmente, cuando lograron entrar por uno de los accesos superiores, la funcionaria universitaria siguió con los estudiantes para callarlos durante el acto, exigiendo respeto a la ceremonia en curso.

    Promesas al aire

    "Respeto profundamente a quienes no quieran escucharme. Les propongo algo: permítanme dirigir mi mensaje, seguramente también hay personas que les gusta escucharme, al final con toda la apertura pueden decirme lo que deseen", fue la promesa de Luis Felipe Guerrero Agripino cuando los estudiantes que lograron entrar al auditorio comenzaron a exponer sus inconformidades.

    Sin embargo, la promesa no se cumplió.

    Apenas terminó con el mensaje donde habló de los avances de la UG y se atrevió a mencionar "defectos y excesos", se bajó del escenario y la maestra de ceremonias tomó el micrófono para exigir silencio porque se trataba de un acto académico en el que no cabían las manifestaciones.

    Junto al grupo de estudiantes que mantenían las pancartas en lo alto estuvo Margarita López para seguir con los regaños, exigiendo que guardaran silencio.

    "Yo creo que no era el momento, creo que el diálogo y la escucha también tiene que hacerse en momentos específicos, no era este el momento", dijo en entrevista Luis Felipe Guerrero Agripino al cuestionarlo por qué no permitió que el grupo de estudiantes se expresaran.

    Aseguró ser un rector con apertura, también aceptó que no conocía cuáles eran las exigencias de los estudiantes a los que se negó a escuchar.

    Por su parte, la defensora de los derechos humanos en el entorno universitario, Margarita López, anunció que se abrirá una investigación por la actuación del personal de seguridad que impidió el acceso a los manifestantes.

    "Una investigación para saber quién determinó esto (el bloqueo de accesos). Hay personas muy evidentes, yo tendré que hacer lo que corresponda. Se les debió permitir el acceso a los estudiantes, por supuesto", señaló la defensora de los derechos humanos en el entorno universitario, que antes exigía a los manifestantes callar.

    16 de agosto de 2023, 16:02

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