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12/5/2025
Para San Juan de Abajo viene la lucha legal por el agua potable

Para San Juan de Abajo viene la lucha legal por el agua potable

Demanda de amparo abre posibilidad a que familias de la olvidada comunidad de San Juan de Abajo vean garantizado el acceso al agua potable tras negativa de Sapal y del municipio de León

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    Unidas, diez familias de habitantes de la comunidad San Juan de Abajo presentaron un amparo contra la negativa del Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de León (Sapal) para dotarlos de este imprescindible servicio. Conocida como una zona de viviendas “irregulares”, esta comunidad se ha caracterizado por el acceso desigual a servicios básicos como el agua, la energía eléctrica, el transporte público, educación y salud.

    El amparo fue anunciado el pasado jueves en una rueda de prensa en la comunidad, encabezada por Sanjuana Abundes, Yolanda Zavala y María Isabel Hernández, tres vecinas precursoras del litigio y el activista Juan Pablo Delgado, quien funge como representante legal del caso. Pero fueron decenas de habitantes de San Juan de Abajo quienes se acercaron a escuchar la estrategia de estas familias, con el ánimo de replicarla para poder así pelear por su derecho al agua.

    Delgado Miranda explicó que, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, ninguna persona debería tener acceso a menos de 50 litros de agua potable al día -el estándar ideal es de 100 litros diarios por persona-. Sin embargo, la población de San Juan de Abajo tiene un acceso aproximado de 4 litros por persona diariamente.

    Foto: Juan José Plascencia
    Foto: Juan José Plascencia

    Hay quienes tienen más de tres décadas habitando aquel territorio, luego de adquirir sus lotes a vendedores fraudulentos que les otorgaron contratos de compra-venta, pero nunca las escrituras de lo que con el paso del tiempo han convertido en sus hogares. La falta de este documento ha sido el argumento del cual se han valido las autoridades para negar a más de 10 mil personas el acceso al agua potable y a la energía eléctrica.

    De acuerdo con el Inegi, son más de 70 mil las personas que en León no cuentan con acceso al agua y a un sistema de drenaje. En su mayoría, los afectados son habitantes de colonias consideradas irregulares.

    Un antecedente de esta lucha se gestó en la colonia Ampliación San Francisco en 2022, donde una familia, acompañada de Juan Pablo Delgado, ganó el litigio a la paramunicipal para tener garantizado su derecho al agua potable después de 30 años. Sin embargo, este y el caso de San Juan de Abajo radica en la exclusión que el Código Territorial da a las viviendas que aún no se encuentran en proceso de regularización.

    “La legislación del estado de Guanajuato el Código Territorial deja en desamparo a las personas que no están en proceso de regularización de sus viviendas; esto implica la imposibilidad real, la imposibilidad fáctica de conectarse al servicio”, explicó Delgado Miranda.

    Foto: Juan José Plascencia
    Foto: Juan José Plascencia

    En enero de 2023 entró en vigor la reforma al Código Territorial presentada por el diputado panista Miguel Salim, que exige a los municipios a dotar de agua potable a todas las colonias en proceso de regularización.

    El amparo surge de la negativa del Sapal para conectar el servicio de agua potable, y a su resistencia incluso para recibir un escrito elaborado por las diez familias en las que solicitan la conexión del servicio. La demanda ya fue radicada en el Juzgado Séptimo del Distrito con el expediente 1163/2023 y se espera sea resuelta en el primer trimestre del 2024.

    “Las familias que firmaron la demanda, considerando que la mayor parte del agua a la que tienen acceso es agua de pipa privada y que de acuerdo incluso las mismas personas proveedoras de las pipas no es para consumo humano, llega apenas en promedio a 4 litros de agua por persona todos los días. Hay un hay una diferencia abismal de lo que debería de ser y de lo que es”, expuso el activista en rueda de prensa.

    Foto: Juan José Plascencia
    Foto: Juan José Plascencia

    Además, en los casos en los que la distribución de agua potable no es gratuita, ninguna persona en el mundo debería gastar más del 3 por ciento de su ingreso total en tener acceso a este servicio. En el caso de San Juan de Abajo, hay familias que gastan entre el 12 y el 20 por ciento de sus ingresos para tener agua mediante la contratación de pipas.

    “Nada se puede en San Juan de Abajo”

    En su más reciente visita a la comunidad en abril pasado, la alcaldesa Alejandra Gutiérrez reiteró esta negativa a vecinas y vecinos, de acuerdo con los mismos habitantes. Pero en su informe de gobierno, en septiembre pasado, el discurso cambió: la munícipe abrió su discurso con el anuncio de haber conseguido el visto bueno de Ferromex para regularizar los lotes de la comunidad.

    Pero ésto es algo que se ha escuchado anteriormente en San Juan. “Nos dicen que sí, pero no nos dicen cuándo, ya han pasado más de 30 años”, dijo Sanjuana Abundes, vecina de la comunidad. Actualmente, la comunidad que alcanza los 10 mil habitantes cuenta sólo con dos tomas de agua potable de Sapal, que son utilizadas para rellenar garrafones para el consumo en las viviendas.

    “El gobierno piensa que con venir con una despensa con eso se cubre la necesidad de una comunidad, en cambio no es así, o sea hay gente que no tiene ni para comprar el agua, ni para solventar, ni para arrimarse a a ir a las tomas a traer agua, las tomas a veces no tienen agua, a veces hay unas filas grandísimas, así que no es fácil”, reclamó Sanjuana.

    Foto: Juan José Plascencia
    Foto: Juan José Plascencia

    Durante la rueda de prensa, las tres mujeres fueron enfáticas en que la poca agua a la que tiene acceso -adquiriéndola mediante pipas particulares- no es para consumo humano. Ellas aseguran que los mismos “piperos” lo han advertido, aunque esta ha sido la única opción para la comunidad en tres décadas.

    “Se imaginan para darle también al perrito de esa agua, lavar los trastes, o sea, no sé qué bacterias traiga. Invitamos a uno de los gobernadores a que nos vea, para que vengan y convivan con nosotros, aunque sea una hora, sin agua aquí en la colonia”, dijo María Isabel Hernández, vecina de San Juan de Abajo desde hace diez años.

    Las dos tomas de agua potable que instaló el Sapal, como lo ha hecho en otras colonias irregulares como Medina, no dan abasto para todas las familias que diariamente acuden a surtir sus garrafones. En ocasiones, los vecinos intentan comprar garrafones en las tiendas, incluso fuera de la comunidad.

    “A veces andamos con mucha sed y se descomponen las tomas de agua, entonces tenemos que estar surtiendo el agua de la de aquí de la que llenan (pipas) o ir hasta la ciudad por garrafones, en las tiendas de aquí no tienen porque se les acaban de los garrafones, los pocos que surten y nos quedamos sin agua”, comentó Sanjuana.

    Foto: Juan José Plasencia
    Foto: Juan José Plasencia

    Edith Fabiola se autodefine como “la más mitotera” de su grupo. Su familia también se sumó a la demanda de amparo y aunque no estuvo frente a los medios durante la rueda de prensa, en entrevista para POPLab no reparó en denunciar que el Instituto Municipal de la Vivienda (IMUVI), también ha incumplido con el compromiso de enviar, como mínimo, una pipa del Sapal para abastecer de agua potable a unas cuantas viviendas.

    El esposo de Fabiola camina diariamente veinte minutos hacia la tomas de agua para abastecerse de uno o dos garrafones, pero no son suficientes para las necesidades de casa: lavar trastes, trapear, lavar el baño, lavar ropa, cocinar. En la última visita de la alcaldesa Alejandra Gutiérrez, Fabiola recuerda sólo “respuestas negativas”.

    “Ella lo que alega es que no se puede y no se puede, nada se puede en San Juan de Abajo. Se le solicitó que metieran otro otra ruta de transporte que nos llevara hasta base Delta y no se puede; se le solicitó que pusiera más tomas de agua y no se puede; se le solicitó que el camión de basura pasara por todas las calles y no nada más por las más importantes, digamos, y no se puede. Las respuestas de ella siempre son negativas”, concluyó.

    Foto:Juan José Plascencia
    Foto:Juan José Plascencia

    Este lunes, en rueda de prensa semanal, la alcaldesa negó que en San Juan de Abajo no han llegado programas sociales, como la entrega de tinacos que ha dado cobertura a colonias donde el acceso al agua no está garantizado. “Hay una mala interpretación o probablemente es mala leche política”, respondió a los cuestionamientos hechos por las vecinas de San Juan de Abajo que forman parte del amparo.

    “Ustedes saben que es un tema legal, que hoy no se puede regularizar, todavía no estamos en proceso de llevar todos los servicios porque esta porque esta el proceso de regularización, pero hemos dado pasos agigantados, no nos hemos cruzado de brazos, por eso se tienen pláticas con Ferromex por el tema de SCT, dijeron que no ven inconveniente en que se pueda hacer el cruce”.

    Finalmente, agregó que la construcción del cruce entre las vías del tren que atraviesan San Juan de Abajo, será el paso más importante para la regularización, y reiteró que la población ha sido dotada de pipas, tinacos y tomas comunitarias.

    15 de noviembre de 2023, 14:09

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