Producción: Juan José Plascencia. Imágenes: Martha Silva.

Para los ciclistas de León y los grupos feministas, la instalación de la Ciclovía emergente sobre el bulevar Adolfo López Mateos significó una lucha de años, y cuando, en medio de la emergencia por el coronavirus, la propusieron al gobierno municipal y este accedió a instalarla, fue una buena noticia en medio de tantas malas. La bautizaron como CALMA, por sus iniciales; niños, hombres y mujeres usuarios de bici la adoptaron con gusto. Ahora, que el municipio ha dado marcha atrás y la ha suspendido, no van a ceder: la quieren de regreso.

En esta lucha no están solas ni solos, hay especialistas en urbanismo como Bárbara Jacob, que las exhortan a no ceder: no solo es un espacio para circular en dos ruedas, es una cuestión de derechos humanos: a la movilidad y a un medio ambiente sano se suma el derecho de las mujeres a sentirse libres, seguras, a ser vistas, un frente más del movimiento feminista que tantas peleas ha dado este año.

Al suspender la ciclovía, el Municipio claudica, por decir lo menos, a la inercia. Su promesa de que algún día será permanente no compra conciencias: varios ciudadanos han levantado la voz con la convicción de recuperarla pues "el tiempo apremia, el tiempo es ahora".

La ciclovía emergente representa una recuperación del espacio público, una opción saludable para desplazarse, una práctica liberadora por el puro gusto de subirte a la bici y simplemente rodar y con ello ayudar a construir una ciudad con menos desigualdades.

El mismo domingo por la noche, día que concluyó el proyecto, integrantes de colectivos ciclistas acudieron frente al edificio conocido como Torres Gemelas, en la esquina del bulevar López Mateos con calle Plan de San Luis, para "tomar" el tercer carril de circulación con rumbo al centro de la ciudad y lo devolvieron, así fuera temporalmente, a los ciclistas que se aventuraron por la zona.

Además, colectivos como Mujeres en bici León, Ciclismo Clásico, RESET GTO, URBE y Bicibles liberaron un posicionamiento sobre la decisión unilateral del Municipio y varios de sus integrantes comenzaron a recolectar firmas para exigir la reinstalación de esta vía de circulación. Su protesta es pacífica pero inflexible: "CALMA de regreso / queremos nuestra ciclovía".

Este miércoles, dieron una actualización: "En menos de una semana el movimiento Sí a la ciclovía ha logrado que 34 organizaciones o colectivos y más de 800 ciudadanos leoneses se manifiesten en rechazo absoluto a la decisión tomada por el ayuntamiento de León de retirar la ciclovía emergente del bulevar Adolfo López Mateos".

También informaron que no ha habido ningún acercamiento por parte del gobierno municipal.

Exigen escuchar la voz de los ciclistas

La aplicación de políticas públicas sustentables como la creación de ciclovías representa para cualquier ciudad un reto para lograr acuerdos entre los diferentes sectores, pero la actual coyuntura por el COVID-19 debería inclinar la balanza a favor de ellas, luego de que el tema de salud ha sido la prioridad de las autoridades en los últimos 10 meses. O al menos, eso se repite a diario.

El propio gobierno municipal reconoció en un reciente comunicado: "El uso de la bicicleta como medio de transporte alternativo cada vez cobra mayor fuerza en la sociedad leonesa al ser económico, seguro y placentero al sentirse libres circulando por la ciudad".

Por eso a muchos ciclistas les parece regresiva e irracional la decisión del gobierno de Héctor López Santillana de retirar un espacio ya ganado y vulnerar los derechos tanto de hombres como de mujeres, pero sobre todo los de ellas, que consideran a la bici un medio de transporte más seguro que, por ejemplo, el transporte público.

La urbanista Bárbara Jacob, quien lidera el colectivo ciclista "Mujer y Movilidad" en Querétaro pero con fuertes vínculos con la ciudad de León, considera que con la "marcha atrás" del Municipio se puede perder una oportunidad histórica.

Detalló que hace unos años, cuando se extendieron los carriles vehiculares en el bulevar López Mateos "succionaron los carriles para ciclistas", quienes fueron dejados prácticamente a su suerte, además de que se aplicó un mal diseño en las jardineras, que resultaron ser una barrera para la interacción humana y el comercio a pie de calle, actividad que fortalece la economía local.

"Una ciclovía es muy importante cuando conecta la zona de vivienda con la zona empleadora, y la de López Mateos tiene esa característica: no es desigual, a diferencia del resto de este tipo de infraestructura", es decir, las ciclovías recientemente construidas le han quitado espacio público al peatón, no al automóvil, y no te llevan directamente a tu destino.

Además, señaló que las ciclovías enrejadas ponen en gran riesgo a las mujeres cuando circulan por ahí en su bici, las deja a merced de asaltos y agresiones.

El reto de la ciudad de León, que cuenta con un mayor número de carriles para bici respecto otras ciudades, es extender esa infraestructura bajo estándares internacionales, ya probados, algo que se cumple en la ciclovía emergente: está a la vista, está iluminada (aunque sea iluminación para automóviles), es amplia, no es excluyente, te conecta con tu destino.

La defensa de las mujeres, en todos los frentes

Bárbara Jacob recordó que León destaca por su larga tradición ciclista y porque tiene uno de los índices más bajos de accidentes mortales con este tipo de usuarios.

"Lo más interesante de lo que ocurre en León", reflexionó la urbanista, "es que haya mujeres que vayan a buscar el cargo de presidente municipal y tú como autoridad pidas que les quiten un espacio seguro a las mujeres, cuando el 51% de los ciudadanos son mujeres".

Con esto queda demostrado, dijo la urbanista, que les excluye, que no se considera a la mujer como parte del espacio público, puesto que su movilidad no es pendular: no solo va de su casa al trabajo y de regreso, también tiene el papel de cuidadora, y como tal debe desplazarse entre varios puntos geográficos para llevar a sus hijos o parientes cercanos a cumplir citas médicas, a la escuela, a clases extraescolares, al supermercado, etc.

En su posicionamiento sobre el tema, los colectivos ciclistas detrás de #SíalaCiclovía mencionan los resultados satisfactorios obtenidos tras el periodo de prueba: "El número de viajes en bicicleta aumentó hasta 126 %, logrando ser triplicado el número de viajes ciclistas" y contribuyó a disminuir la aglomeración en el transporte público, luego de que 46 % de esos usuarios, con la ciclovía emergente se volvieron ciclistas. Esta vía, además "constituye una acción en materia de equidad de género que se encuentra en el ámbito de competencia de las autoridades municipales ya que por su diseño permite a las mujeres ver y ser vistas, contar con vigilancia informal y acceso a ayuda, oír y ser oída, principios de seguridad de Montreal de las mujeres."

Tan solo hay que voltear a ver la experiencia de otras ciudades como la Ciudad de México, que habilitó recientemente un carril ciclista en la importante vía de Insurgentes: una ciclovía segura atrae a todos los perfiles sociales, con ella conservan la sana distancia, mejoran su capacidad pulmonar y con ello le ahorran, quizá millones de pesos, al sistema de salud.

Por ello, exhortó a sus colegas leoneses a defender la ciclovía emergente pues es un tema de salud, económico, de seguridad, de inclusión. Al municipio llamó a ver cómo no es cuestión de hacer menos uno u otro medio de transporte, pero tampoco de seguir manteniendo una ciudad desigual. Todo es cuestión de planeación, concluyó.

La prueba piloto de la ciclovía emergente, que arrancó operaciones el 13 de julio con un carril exclusivo para ciclistas sobre el bulevar Adolfo López Mateos, con 6 kilómetros de longitud en ambos sentidos, cumplió su plazo de tres meses el pasado 13 de octubre. Una semana después se anunció de manera oficial que sería permanente, aunque se dijo que habría posibles cambios, que resultarían de un proyecto ejecutivo al que se asignó de manera directa un recurso por 1.8 millones de pesos.

No obstante, días después, el Municipio de León informó que a partir del 8 de noviembre se suspendía "hasta nuevo aviso". El proyecto ejecutivo, agregó, continuaba en análisis y se presentará en diciembre, aunque no hay fecha para ello, ni para el inicio de obras.