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12/5/2025
Irregularidades en permisos y “mesas de trabajo” infructuosas reavivan movilizaciones por obras en el Malecón

Irregularidades en permisos y “mesas de trabajo” infructuosas reavivan movilizaciones por obras en el Malecón

Tras la tala de 63 árboles distintos colectivos levantaron la voz y pidieron ser escuchados, después llegó la convocatoria a la conformación de “mesas de trabajo” en donde se han encontrado con una autoridad que se muestra reacia y aferrada a la obra

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    Con movilizaciones y amparos promovidos por ciudadanos ante la tala de 63 árboles, colectivos y activistas buscan detener la ampliación del Malecón del Río, obra que ha sido señalada por contar con permisos irregulares. Las “mesas de trabajo” entre autoridades municipales y colectivos sólo han servido para ratificar la postura de una autoridad que busca avanzar con las obras.

    Poco más de 200 personas se pronunciaron el domingo 2 de julio en contra de la tala de ejemplares y la continuación de la obra que amenaza al abundante arbolado que existe en la zona.

    Marchando desde el Arco de la Calzada hasta Presidencia Municipal, los manifestantes se unieron en una sola voz para exigir a las autoridades la reparación del daño, así como obras con sentido humano y ambiental.

    “Sí la ciudad entendiera que debemos planearnos hacía el futuro desde una perspectiva de movilidad sostenible no tendríamos árboles talados porque no se estaría invirtiendo más en obras prioritariamente automovilísticas”, sentenció Juan Pablo Delgado, abogado y activista.

    Hace unos días, los colectivos URBE y “Déjame Plantado” dieron a conocer la demanda de amparo ciudadana contra las afectaciones ambientales por la ampliación del Malecón del Río.

    En ella, Juan Pablo Delgado reveló una serie de inconsistencias en los permisos otorgados por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales -Semarnat- al gobierno municipal de León para las obras en el Malecón.

    Una de las irregularidades señaladas por el abogado, explica que la ampliación del Malecón tiene como finalidad que los autos puedan circular a 70 kilómetros por hora en ésta vía. Pero de acuerdo con Juan Pablo, este fin contradice la normativa de la nueva Ley General de Movilidad y Seguridad Ciudadana, que establece que los automóviles no pueden circular a más de 50 kilómetros por hora en dicha vialidad.

    Otro de los señalamientos indican que en el documento difundido a través de redes sociales por la alcaldesa Alejandra Gutiérrez no existe una autorización expresa para la tala de árboles en las obras.

    “El documento de Semarnat tiene muchas inconsistencias que son apreciables a simple vista y consideramos que podrían ser razones suficientes como para que se otorgara la suspensión provisional”, afirmó Juan Pablo Delgado.

    Tras la primera movilización y el reclamo de los colectivos por no ser escuchados, el gobierno municipal los convocó para participar en “mesas de trabajo”; sin embargo, en éstas sólo les hablan de la importancia de que se realice la obra, explicaron los activistas que han acudido a las reuniones.

    “En la última reunión un funcionario de Obra Pública nos explicó que la obra era beneficiosa para el medio ambiente porque así los autos no iban a pasar tanto tiempo en el Malecón detenidos”, narró Christopher Monsalvo, activista.

    Además de que las autoridades han insistido a los colectivos en tomarse fotografías con la alcaldesa y firmar una minuta en donde se establecen acuerdos entre el municipio y los colectivos, que a decir de Ernesto Ramírez resultan poco claros.

    Ambas reuniones han sido privadas y sin acceso a medios.

    “Despertar de conciencias”

    Desde niños hasta adultos mayores se congregaron la mañana de este domingo 2 de julio en el arco de la calzada, portando atuendos negros -en señal de luto por la tala de 63 árboles- con distintivos en verde y con letreros en mano hechos de cartón reciclado.

    Con consignas como: “¡más árboles menos coches!”, “¡Alejandra taladora no serás gobernadora!” y “¡gobierno, tu respuesta no es verde es negligente!”, dio inicio la segunda movilización ciudadana por la tala de los 63 árboles.

    Las poco más de 200 personas manifestantes recorrieron parte de la calzada hasta llegar al Malecón del Río, donde se detuvieron para lanzar pétalos de flores para recordar que en ese sitio 63 árboles formaron parte del paisaje urbano que hoy se encuentra desolado por las obras de la ampliación del Malecón del Río.

    “La tala ha sido sistemática, desde la implementación del SIT León ha sido muy golpeado en este aspecto. El movimiento está despertando conciencias”, mencionó Celia Garza, activista.

    Ante la sorpresa de los automovilistas, el contingente cruzó hacia López Mateos para seguir su marcha hasta la calle Hidalgo. A lo largo de los poco más de 2 kilómetros que recorrieron los manifestantes más personas se les unían, incluso automovilistas que circulaban por el carril contrario hacían sonar su claxon en señal de apoyo al movimiento.

    “Están afectando terriblemente el medio ambiente y el gobierno no está respondiendo, parece que no están enterados de la situación de cambio climático”, explicó Margarita Sánchez, activista.

    Al llegar al centro el contingente se incrementó, pues la gente pasó del asombro a lanzar consignas. Algunos curiosos preguntaban qué pasaba y tras enterarse del motivo, no dudaban en unirse.

    Una vez frente a presidencia, cuando los manifestantes expresaban su postura, fueron interrumpidos de manera repentina por un sonido a través de las bocinas que se encuentran en la parte alta del palacio municipal. El malestar fue generalizado, las rechiflas y gritos no se hicieron esperar.

    “Es una provocación y la clara muestra de que el gobierno nos ignora y se burla de nosotros”, expresó María Rodríguez, manifestante.

    Una vez pasada la abrupta interrupción, los colectivos continuaron con la lectura de las principales demandas:

      • Una adaptación al diseño de la vialidad que no comprometa ni afecte el desarrollo y vida de más árboles, así como fauna de la zona.
      • El rediseño del proyecto ejecutivo de la obra y que se reconsideren las adecuaciones necesarias.
      • Un estudio comparativo cuantificado de requerimientos de mantenimiento y los servicios ambientales que ofrecía el arbolado retirado, en contraste con los nuevos ejemplares que se plantarán en compensación, así como la demostración de los beneficios inmediatos que estos traerán.

    Al finalizar, los colectivos anunciaron más movilizaciones y actividades en contra de la vulneración del derecho a una movilidad sustentable.

    Amparo exhibe irregularidades

    Tras la tala de 63 árboles, colectivos ambientalistas como URBE, Planeta B y FURA convocaron a la ciudadanía a firmar para presentar una demanda de amparo que detendría la obra y el corte de más ejemplares.

    La respuesta de la sociedad fue inmediata y masiva, logrando juntar en 4 horas más de 329 firmas que sustentan el amparo que fue entregado en oficinas del Poder Judicial de la Federación el miércoles 28 de junio.

    El viernes 30 de junio, las activistas Claudia García de colectivo ambientalista URBE, Celia Garza de la organización Déjame Plantado, y el abogado Juan Pablo Delgado evidenciaron en rueda de prensa varias inconsistencias que podrían ocasionar la suspensión de la obra que se lleva a cabo en el Malecón del Río.

    La primera anomalía a la que Juan Pablo Delgado hizo referencia fue que la ampliación de la vialidad tiene como finalidad que los automóviles circulen a 70 kilómetros por hora, velocidad que con la reforma a la Ley de Movilidad hoy es ilegal, detalló.

    “Este documento es del 21 de julio del 2020, en mayo del 2021 entra en vigor la Ley General de Movilidad y Seguridad Ciudadana que impide transitar por el Malecón del Río a más de 50 kilómetros, lo que dejaría sin validez el permiso”, explicó el activista.

    Por lo que el municipio, ante el conocimiento de la reforma a la ley de movilidad, debió haber solicitado de nuevo el permiso a la Semarnat.

    El activista mencionó que esta situación era del conocimiento de las autoridades, pues el mismo secretario de ayuntamiento, Jorge Lona, hizo referencia a que la ley municipal de movilidad no ha sido armonizada.

    Otra de las anomalías que presenta el documento es la falta del permiso para la tala de ejemplares, “yo les invito a leer en este documento, no se especifica que se pueden derribar árboles, en ningún lado lo dice y mucho menos en los resolutivos, en donde debería de mencionarse que se pueden talar ejemplares. Además, en la lista de las actividades no está considerada ni la tala ni la remoción de los árboles”, relató el activista.

    Pero a ello se le sumaron otras, como la imprecisión de la fecha de construcción del Malecón, así como la elaboración de un estudio a profundidad de la evaluación rigurosa de la fauna que habita el lugar.

    Otro de los criterios para que Semarnat diera la autorización de la obra del Malecón habla de fomentar el uso de agua tratada en el riego de áreas verdes, disminuyendo así el uso de agua potable, para ello las autoridades municipales establecieron que al reducir el arbolado se cubriría este requisito, expresó Juan Pablo.

    “En el documento se dice que el proyecto cumple con el lineamiento al requerir menos volumen de agua al disminuir algunas áreas jardinadas, o sea, voy a bajar el consumo de agua porque voy a talar los árboles, es absurdo decir que eso es un ahorro de agua”, afirmó Juan Pablo Delgado.

    Es por estas anomalías, sumadas al riesgo de la tala de más árboles, que los colectivos buscan con el amparo la cancelación de la obra, así como la redistribución del presupuesto en materia de movilidad, restituir las zonas arboladas que se vieron afectadas por la tala y la actualización de la Ley de movilidad en el municipio.

    Reuniones para la foto

    Ernesto Ramírez, cofundador de URBE, explicó que en la reunión del martes 27, Alejandra Gutiérrez insistió en tomarse una foto con los asistentes, así como firmar una minuta en donde se establecen acuerdos; sin embargo, URBE no lo firmó al no existir una negociación.

    “Nos han estado insistiendo en que firmemos la minuta y tomarnos fotos, a lo cual nos hemos negado. Porque lo hacen con esta idea de decir que están avanzando con la ciudadanía”, narró el cofundador de URBE.

    En dichas reuniones, el colectivo mencionó que tanto la alcaldesa como José Luis Solís Anguiano, subdirector general de ejecución de obra y mantenimiento, se han comprometido a que no habrá más tala de árboles, pero se mostraron renuentes a notificar a la Semarnat la reducción de los árboles que serían afectados por las obras.

    “Fueron muy reacios en enviar de una vez la notificación a Semarnat por el cambio del proyecto porque originalmente eran más de 90 las afectaciones al arbolado, pero al final solo fueron 76, por lo que ese cambio tendría que haberse notificado”, narró Ernesto Ramírez.

    Además de mencionar que no se entiende el motivo de la reunión, si al final toda la información que les presentaron ya era pública, lo que les da la sensación de una simulación por parte de las autoridades.

    3 de julio de 2023, 03:57

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