* Con imágenes de Juan José Plascencia

La lucha por los derechos de las mujeres no ha concluido con el paro o las marchas, donde participaron miles de mujeres, al menos 5 mil en la ciudad de León; ahora ha comenzado a afectar la cotidianidad de los centros educativos que se han presumido como "de excelencia".

Escuelas de nivel medio superior y superior como el Instituto Lux, el CeTis 77, la Universidad de Guanajuato campus Celaya y San Carlos, la Universidad La Salle Bajío, el Tecnológico de México en León y el campus Guanajuato del IPN, entre otras, se han visto sacudidas por los llamados "tendederos" de denuncias públicas de acoso sexual y otras violencias, donde las alumnas se han atrevido a exhibir las conductas delictivas que han recibido de parte de algunos maestros y compañeros.

Aunque varias quejas son generales, relacionadas con comentarios machistas en las clases o los pasillos, otras describen actos, fechas, dichos, que van del acoso a la agresión sexual. Las chicas aseguran que ahora que encontraron una forma de tener voz, no se van a callar.

Mientras, las autoridades de todos los niveles continúan pasmadas, arrastradas por la ola feminista.

Verónica Cruz, directora de la organización Las Libres, dijo que "da mucha emoción ver a las adolescentes, hablando en sus familias, con sus amigas, movilizando las escuelas, verlas interpelando a sus profesores acosadores, es pura felicidad ver esta traducción del feminismo en la vida cotidiana de la mayoría de las mujeres, su aspiración máxima".

Estamos en tal nivel de hartazgo donde "las jóvenes, las adolescentes, nos han dado una cátedra de cero tolerancia a todo tipo de violencia, 'nada es nada, no es no, no vamos a tolerar nada de violencia contra las mujeres'".

Sobre los tendederos de denuncias, que desde hace semanas trastocan las instituciones educativas, la especialista comentó que están siendo muy buena estrategia para denunciar anónima y confidencialmente a los agresores en las escuelas, porque ahora las jóvenes se encuentran empoderadas, sin embargo, "en cuanto viene una intimidación de la autoridad me parece que el grupo se hace hacia atrás, y es este el momento de mover la estructura, y ahí está el malentendido: no basta con denunciar y que la estructura por sí misma lo va a resolver, ya que esta no entiende, no sabe; quien tiene claro el problema y la solución son las mismas mujeres y la misma comunidad que vive en ese ambiente".

A estas jóvenes les pide no frenarse por miedo tras el paro, el tendedero o la manifestación, "no podemos permitir que el miedo se apodere de nosotras, tenemos que hacer que la estructura se mueva, que el miedo sirva para mover la estructura, pero entiendo que hay una incapacidad en la estructura para moverse: hoy día las instituciones no saben que la carga de la prueba está en el agresor y que no pueden seguirles pidiendo las pruebas, menos en acoso sexual, por las condiciones en que se da, de subordinación, de abuso de poder, de ejercicio arbitrario de complicidades de autoridades."

El apoyo de las veteranas a las nuevas feministas

Las históricas marchas del 8 de marzo y del paro nacional un día después, "son resultado de una lucha de muchas otras mujeres que nos han precedido", dijo Verónica Cruz, durante la Charla POP sobre feminismo y derechos.

"Lo que sigue a la movilización y a la toma de conciencia masiva nos tiene que llevar a la transformación de todo. Las decisiones de la vida política, pública, económica y social. El reto para los hombres será cómo encontrar una mejor manera de relacionarse con las mujeres, por lo menos empezar el diálogo entre hombres y mujeres" y así transformar la cultura, es un proceso civilizatorio que duele y les duele particularmente a los de los privilegios, los hombres, quienes son los que ejercen el poder y abusan de ese poder y de la violencia.

Sin embargo, la especialista en temas de género confiesa que "siente miedo" porque no ve a ninguna autoridad ni gobierno, funcionario o funcionaria, en resumen, al Estado, dando una sola propuesta concreta, por la indignación, la rabia, que ya están en la calle", para ver cómo se va a bajar la impunidad, cómo se van a investigar los feminicidios, cómo generar una política pública de prevención de la violencia contra las mujeres, "y a eso nadie le atina por dónde empezar."

Teme también estar viendo cómo los políticos y funcionarios repiten discursos, protocolos, de hace 10, 20 años, "es un tema de entender el problema complejo para dar respuestas complejas, no de poner todo en cajitas, porque la violencia contra las mujeres ha ido evolucionando y aún hay poco entendimiento de lo que está pasando".

Sin embargo, "nuestra experiencia en Las Libres, con la Universidad de Guanajuato, también es acompañando al Gobierno del Estado, no hemos encontrado otra manera mas que acompañándolo, explicándole cómo lo tiene qué hacer, caso por caso, en el contexto", pero también a la sociedad. Se requieren talleres de alfabetización jurídica sobre derechos humanos, ya que cuando uno denuncia tiene qué saber cuáles son las obligaciones de las instituciones y exigirles respuestas concretas y rendición de cuentas.

Trascender la discusión para dar paso al diálogo

Por su parte, la periodista Verónica Espinosa, también participante en la misma Charla POP, comentó que actualmente en el tema de género nos encontramos estancados en la discusión más que en el diálogo, y coincide con la titular de Las Libres: lo preocupante es que tras estas manifestaciones masivas, el 10 de marzo no haya habido ni un anuncio, ni una incipiente señal de una política preventiva enfocada en las mujeres, algo más que evidente en Guanajuato, que ni siquiera tiene política de prevención de seguridad en general.

La también integrante de la Red Nacional de Mujeres Periodistas mencionó que es importante dejarles claro a las mujeres que su papel no termina con una marcha, con una manta, con una denuncia, con la protesta social, "lo que hay que continuar con esta presencia permanente ante autoridades e instituciones, suena complicado y lo es, se requiere mucha paciencia."

Por ello, dice su colega en Las Libres, la responsabilidad históricas de las veteranas con las jóvenes que están descubriendo el feminismo es la formación de nuevos grupos, nuevas colectivas, idea que secundó la periodista: sí, acompañarlas en el diálogo con los gobiernos, en la academia, en la enseñanza, en los Ministerios Públicos.

Verónica Cruz destacó la labor de esas maestras que están atreviéndose a denunciar a sus compañeros profesores agresores de jóvenes, adolescentes e incluso, niñas, es menester darles a estas maestras las herramientas necesarias para que continúen acompañando a las jóvenes, porque estas docentes van a ser el mejor recurso de esa escuela, además de la necesidad de fortalecer a los papás de las víctimas para que no desistan en sus denuncias y que a su vez, estos papás acompañen a otros. "Las feministas no tenemos que hacerlo todo".

El paso que aún falta, dijo, es la sanción ejemplar: a jueces, a ministerios públicos, a rectores, a profesores que no atienden la problemática (del acoso), porque la mayoría de la gente no entiende hasta dónde alcanza la responsabilidad del Estado y sus funcionarios para la omisión, la no actuación o la revictimización.

Reconoció que falta una guía para identificar el acoso sexual, "pero también una guía para los hombres, que les diga qué les va a pasar si lo hacen", si perpetran estas reprobables conductas.

Tendedero en Instituto Lux

Pese a la oposición de las autoridades de la escuela, alumnas de bachillerato del Instituto Lux pusieron un tendedero de denuncias de violencia tanto por parte de compañeros como de maestros, y realizaron al menos una audiencia en el patio de la escuela, que congregó a cientos de estudiantes que gritaban "Yo sí te creo" ante los casos expuestos por una oradora.

Sin embargo, las denuncias con nombres y apellidos en el tendedero fueron retiradas, pues las autoridades de la institución consideraron que eso podría generar problemas legales, según denunciaron las estudiantes a POPLab. En lugar de eso, en la escuela se realizó una dinámica de rechazo a la violencia y sensibilización a la equidad de género durante el receso del día 10 de marzo.

“Les interesa más proteger el prestigio que a nosotras” dijo una de las alumnas. Su malestar lo hicieron patente en mensajes que se pegaron en la escuela, algunos hacen mención de delitos graves. "Mi violador camina por estos pasillos, el tuyo, ¿qué tan cerca está?".

POPLab pidió a la directiva de la institución su postura ante las protestas, la cual no fue recibida al cierre de esta nota.

Universidad de Guanajuato Campus Celaya

Pese al camino ya recorrido por la comunidad universitaria de la Universidad de Guanajuato en el tema del acoso sexual a estudiantes, este no ha sido resuelto. Al igual que el campus San Carlos, la sede "Juan Pablo II" ubicada en Celaya, inauguró su propio tendedero de denuncias, impulsadas por la conmemoración del 8 de marzo.

Ahí se mencionaron prestigiados catedráticos, e incluso alguno con un puesto en la mismísima rectoría de Campus. El tema alcanzó la esfera de los campus central y de León, mas para este miércoles 12 de marzo, personas desconocidas lo quitaron y desde temprano ya no estaban.

Extraoficialmente se supo que también hackearon y cerraron la página de un colectivo de mujeres de Celaya que había publicado esos tendederos.

"Hoy todo estaba muy limpio, ni huella", dijo la fuente a POPLab.

UG campus San Carlos

Este miércoles, la sede de la UG en León fue escenario de una nueva protesta estudiantil, siendo los alumnos de Medicina los protagonistas. Ellos, junto con compañeros de otras carreras como Nutrición, Psicología, Sociología, además de colectivos feministas, se manifestaron y marcharon contra el abuso de autoridad, pues tanto hombres como mujeres han sido acosados y hostigados durante sus campos clínicos, siendo ellas más afectadas, pues se agrega el componente de violencia sexual.

La protesta arrancó a las 9:00 am del Patio de Salud, para trasladarse poco después a los pasillos y concluir en el patio de Sociales, cerca del mediodía.

Chistes machistas, insinuaciones, acoso laboral y sexual, "magreo", violación, es la escala del "Acosómetro" que han identificado los estudiantes de medicina en su práctica diaria o durante el servicio social, y que fueron objeto de las denuncias. El "magreo" es un término con el que identifican el manoseo y contacto físico indeseable por parte de los varones hacia las mujeres, con el pretexto de hacer auscultaciones o revisiones médicas, tanto cuando ella es la practicante que necesita conocer la técnica como cuando es la doctora y el paciente se propasa.

Si a esto se le suma que los estudiantes de medicina son enviados a comunidades alejadas sin infraestructura (agua potable, luz eléctrica y mucho menos teléfono) quedan en un estado de indefensión, en caso de ser víctimas de cualquier tipo de agresión.

Pero el peligro permanece latente dentro de los mismos hospitales de la zona urbana, donde las y los jóvenes tienen que obedecer la jerarquía y son expuestos a situaciones degradantes o de acoso, solo por estar en el nivel más bajo.

El exhorto en las páginas de la comunidad estudiantil de la UG, y por supuesto durante la manifestación fue "que las denuncias no se queden en los salones, no se callen, ¡no nos callemos!". Por ello exigieron a las autoridades universitarias ¿Hasta cuándo se van a tomar cartas en el asunto?

IPN Guanajuato

La Unidad Profesional Interdisciplinaria de Ingeniería Campus Guanajuato del Instituto Politécnico Nacional también ha registrado señalamientos públicos contra profesores y alumnos como acosadores sexuales, desde inicio de semana.

El director, Salvador Cruz, dijo que solo tiene una sola denuncia oficial de parte de la comunidad guanajuatense (en un universo de 1,533 dentro del sistema IPN), aunque él reconoce que no debe ser la única, de ahí la intención de poner la mesa de recepción a un lado del llamado "tendedero" (término que él, personalmente, no aprueba, por tener una connotación negativa) la cual no es para inhibir las denuncias sino "crear el espacio" seguro para que puedan tener un seguimiento. Así, no solo la persona que recibe las denuncias es una psicóloga, sino que además hay una segunda computadora para aquella alumna o alumno que se sienta más cómodo en caso de querer hacer la denuncia sin testigos, y mandarla directo al sistema del IPN.

Dijo también que él veía aspectos positivos de esta práctica, cuando por un lado, al evidenciar estas prácticas reprobables que lastiman, "serán expresiones que sucumben y dan la oportunidad de construir" una nueva comunidad. La instrucción al máximo nivel, dijo, es que no se retire ni un nombre ni un papelito, de 19 pegados, por parte de la autoridad, destacándose que se repiten varios nombres de profesores, aunque su obligación es generar un escenario para que se formalizaran todas las denuncias.

"A mí me da mucha impotencia porque de entre los casos ahí expuestos yo sabía de un caso, pero no tengo ninguna denuncia, ninguna prueba, entonces ¿yo qué hago?, porque no puedo proceder en contra de la persona, que exigirá 'ahora demuéstramelo'".

Sin embargo, exhortó a la comunidad a conocer las primeras conclusiones de autoridades centrales del IPN luego de tomar acciones contra el acoso, que se aceleraron desde el pasado mes de noviembre, pero con la intensión, en primer lugar, de no revictimizar, pero con la idea de avanzar y de resolver, algo que solamente se logrará con denuncias formales.

Estudiantes consultadas por POPLab comentaron que la idea de montar el tendedero surgió de acciones similares en otros campus del país desde el semestre pasado, lo cual no fue del todo bien acogido por todas las alumnas consultadas, por miedo, ni por las autoridades educativas, ya que para estas, daría la imagen de que las denunciantes no tenían apoyo "pero compañeras que intentaron denunciar, se les dijo que no procedieron sus casos, una presentó capturas de la conversación y le dijeron que no procede porque (el sujeto) le contestó con un emoji. A otra más le dijeron que tenía que enfrentar a su acosador".

Aún así, hace unos días, cuando alguien puso la primera denuncia provocó que otras chicas tomaran valor y se sumaran.

Respecto a la mesa de denuncias formales al lado del tendedero, a las estudiantes les parece que "ofrecen denuncias anónimas enfrente de todos", de ahí que solo haya una sola denuncia formal, "tienen miedo de que las vean (...) no nos dieron ninguna seguridad de nada".

Sucede que ya ha comenzado a haber amenazas contra las chicas que han sido identificadas con la iniciativa, de ser objeto de denuncias ante el Ministerio Público, aunque ha habido otras quejas de que el tendedero "va a romper matrimonios".

No obstante, las jóvenes han reconocido que hay varios organismos que les podrían prestar apoyo como el COSECOVI (Comité de seguridad y contra la violencia), Derechos politécnicos y Red de género, que es el más nuevo por todo lo que ha pasado y a quien le conceden más confianza, por ser el único que apoya el anonimato y seguridad de las chicas.

"Quieren que paremos, pero ahora que encontramos la voz no nos vamos a callar", aseguraron.

Cetis 77

Esta escuela pública de bachillerato en León también vivió una jornada intensa a propósito del Día Internacional de la Mujer, al realizar primero un tendedero de denuncias el pasado fin de semana para posteriormente, el día 9 de marzo, una manifestación dentro de las instalaciones, ubicadas en la zona de Delta. Ahí gran parte de la comunidad estudiantil protestó por que un profesor señalado por acoso sexual continuara dando clases, pese haberlo hecho del conocimiento de la Dirección.

Según la directora, Rocío Botello Hernández, la institución fue sorprendida por la denuncia pública de los estudiantes, ya que aunque ella se enteró por medio de "chismes"(sic) de la noticia a partir del jueves de la semana pasada, inmediatamente al día siguiente (viernes 6 de marzo) acudió con los grupos del profesor señalado para conocer las inquietudes de los muchachos, donde al menos tres niñas externaron "los comentarios que ellas consideran que es acoso".

La directora dijo que hasta el día martes, día de la entrevista, recibió la primera denuncia formal, la que sería atendida de inmediato. También acuso a dos mujeres, integrantes del personal administrativo, de "dirigir", "coordinar" y "manipular" a las estudiantes para expresarse de esta manera, "para obtener otras intensiones". Tenemos videos de todo, advirtió.

Sin embargo, Rocío Botello reconoció que el maestro señalado tiene antecedentes de conductas similares de hace 15 años, sin embargo, en ese entonces fue sancionado. Nosotros no sabíamos que había reincidido, aseguró. Comentó a POPLab que en la denuncia que acababa de recibir había copias de identificaciones que padres de familia que apoyaban la queja, con fecha de 26 de febrero "cuando yo al día siguiente empecé a preguntar", aunque insistió que ella recién acaba de enterarse y que aunque pidió por escrito a los jefes de departamento y a los asesores información sobre el caso, no había nada (oficial).

También destacó que aunque usualmente los padres de familia acuden a la Dirección para tratar cualquier detalle de la educación de los muchachos, tampoco había habido un acercamiento para tratar el tema que hoy nos ocupa. "No se vale tirar la piedra y esconder la mano, al menos nosotros no estábamos informados (de la queja). Nosotros siempre les hemos creído a los alumnos", no obstante, se quejó de la falta de instrucciones desde el gobierno federal para tratar, por ejemplo, la ausencia de algunas mujeres del personal ante el paro del día 9: "Primero hacen su desorden y luego no nos dicen cómo se compone", y también de la indolencia de los padres de familia que permitieron que sus hijas (del turno de la mañana) no respetaran el horario de salida y permanecieran en las instalaciones durante la protesta, que ocurrió en el turno de la tarde "y entonces dónde queda el trabajo de todos los días, de cuidarlos, ¿que tal si algo les pasa?".

El paro nacional de mujeres, en opinión de la directora, en lugar de abonar a una causa, fue lo contrario. "En la institución nunca habíamos tenido un desorden semejante. Jamás".

Sin embargo, su versión contrasta con lo dicho por alumnas consultadas a las afueras del Cetis, quienes aseguraron que la Dirección sí sabía de las quejas mucho antes de que se hicieran públicas, ya por medio de carteles en la escuela o en redes sociales.

También comentaron que durante el diálogo que las manifestantes tuvieron con Rocío Botello el día 9 de marzo, hubo cerrazón y evasión por parte de la directiva.

Universidad de La Salle Bajío

Las denuncias en la Universidad de La Salle Bajío siguen llegando y el tendedero sigue acumulando papelitos con nombres.

Alumnas que conversaron con POPLab aseguraron que las autoridades universitarias se comprometieron a atender los casos y confían en que trabajarán para que el espacio educativo sea más seguro para todas.

CETMEJA | CETis No. 115

Esta institución pública de nivel medio superior ubicada en Celaya fue "sorprendida" también por un tendedero de denuncias tras la jornada de protestas feministas.

Varias publicaciones en una página de Facebook de esta comunidad comenzaron a mostrar casos anónimos, mas en algunos comentarios, egresadas con nombre y foto hablaban de sus propias experiencias, señalando a los profesores acosadores con apellidos y otros detalles.

La persona que administra la página Gente Pudiente Del Cetis 115 pidió a las víctimas de acoso acercarse "a personas calificadas" para denunciar su caso "No solo esto tenemos que radicar(sic) en el CETIS 115, hay muchas cosas que no están bien, pero tenemos miedo de las represalias o que los profesores nos reprueben por no quedarnos callado pero basta. Esta página se compromete a ello, pueden mandar mensajes privados".

ITL

Desde el 5 de marzo, en ambos campus del Tecnológico de México en León se instalaron tendederos de denuncias, que incluso provocaron reacciones en el sindicato de profesores, que amenazó con demandar a la dirección de la escuela y a la sociedad de alumnos, sin que haya trascendido alguna acción oficial.

El tendedero se mantendría hasta este viernes, no obstante, desde principios de semana personas desconocidas cortaron los nombres en aquellas denuncias que señalaban directamente a algún profesor o alumno.

Colegio Jol Gua Ber

Este colegio privado de León registró desde el mes de febrero protestas por las denuncias de acoso sexual de un profesor contra dos menores, alumnas de los niveles de secundaria y preparatoria. En las protestas que exigían la destitución de este profesor, participaron no solo alumnos, padres de familia y también algunos profesores, quienes, según información extraoficial, fueron despedidos.

No obstante, las protestas tuvieron resultados: el 26 de febrero, el director general José de la Luz Vilchis informó que Pedro “N”, profesor de biología y física en nivel secundaria, había sido separado de su cargo. Presuntamente ya había sido acusado entre 2017 y 2018 por acosar sexualmente a estudiantes de los mismos niveles educativos, aunque fue durante las fiestas de diciembre pasado cuando comenzaron las manifestaciones y paros simbólicos por parte de los alumnos, quienes, según una versión extraoficial, habrían sido amenazados por la Dirección de no continuar con ello so pena de sufrir represalias en la entrega de documentación.

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