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Panistas apuestan por la descalificación y misoginia para defender a Carlos Zamarripa
Frente a instituciones que se negaban a reconocer la desaparición forzada en Guanajuato, hace un año cinco familias de Irapuato se unieron para exigir resultados, hoy las víctimas se cuentan por centena
Con información de Edith Domínguez y Carmen Pizano
Han transcurrido 11 días desde que se localizaron los primeros restos humanos en la fosa clandestina de Salvatierra, la más grande hasta el momento en Guanajuato, y nueve días de la fosa de Cortazar, pero las familias de personas desaparecidas siguen sin recibir información precisa sobre los restos y la identificación.
Escritos formales, llamadas por teléfono, mensajes de texto a las personas responsables en la Fiscalía General del Estado no han sido suficientes para obtener algo más que promesas: “siempre trabajamos para ustedes”, “ténganos confianza”, frases que conocen a la perfección las familias que llevan meses, incluso años en busca de su ser querido.

Con actitudes misóginas y de descalificación en contra de la comisionada nacional de búsqueda, Karla Quintana Osuna, panistas salieron en defensa de Carlos Zamarripa Aguirre.
Mientras buscadoras de diferentes colectivos reconocían y agradecían a la titular de la Comisión Nacional de Búsqueda por la denuncia pública que hizo en Guanajuato en contra de la Fiscalía General del Estado, representantes públicos emanados del PAN se enfocaron en reclamar que llegó al estado “enviada” por Andrés Manuel López Obrador para “generar ruido” con un “show mediático” y distraer a la opinión pública de los “graves problemas” como los recortes que ha hecho la Federación a los estados.
A la exigencia de información se sumó la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), organismo que a través de un comunicado de prensa recordó a la Fiscalía General del Estado que está obligada por la Ley General de Víctimas a brindar a familiares de las víctimas información, además de que tienen derecho a estar presentes en las exhumaciones.

Este domingo decenas de familias salieron a las calles de Irapuato para marchar por sus desaparecidos, para demandar que se concrete la prometida mesa de identificación y conmemorar que fue hace un año que se unieron apenas cinco personas de Irapuato para salir a buscar a sus seres queridos, pero que hoy es un problema que afecta a al menos un millar de familias.
Misoginia panista
No habían transcurrido ni 24 horas desde que Karla Quintana Osuna, comisionada nacional de búsqueda, denunció públicamente la opacidad con la que la Fiscalía maneja los resultados de los hallazgos en Salvatierra y Cortazar, donde se presume se localizaron restos de al menos 100 personas, cuando el diputado federal Jorge Espadas Galván salió en defensa de las acciones de la Fiscalía de Carlos Zamarripa Aguirre.
El coordinador de los diputados federales panistas en Guanajuato no quiso referirse a Karla Quintana por su nombre, tampoco por su cargo y optó por simplemente llamarla “señora”.
Durante la conferencia de prensa de cada semana del Comité Directivo Estatal del PAN, se cuestionó al legislador federal sobre los reclamos de la comisionada nacional de búsqueda, después de que elementos estatales le impidieran el acceso a la fosa de Cortazar.
Espadas Galván aplaudió que elementos ministeriales y de las Fuerzas de Seguridad Pública negaran a Karla Quintana el paso a la fosa de Cortazar, también que no se brinde información a los familiares, porque dijo, la Fiscalía busca cuidar la investigación.
“Entiendo que la señora venga a litigar en los medios lo que no puede litigar en los canales formales porque no tiene la razón. Si hay una investigación abierta tienen que cuidar todos los datos de prueba”.
El diputado federal, aseguró que a diferencia de Karla Quintana él tiene noción de derecho.
“Yo no sé qué piense la señora, no tengo idea de qué piense, pero conozco un poquito de derecho, un poquito del proceso penal, además de que tengo sentido común que me indica que si yo voy a contaminar un espacio que es investigado voy a echar a perder la investigación”.
Después de que se refiriera en al menos tres ocasiones a Quintana Osuna como “la señora”, una reportera recordó a Espadas Galván que la comisionada nacional de búsqueda tiene el grado académico de doctora.
Karla Quintana cuenta con dos licenciaturas: en Derecho y en Lengua y Literatura Hispánicas por la UNAM. Tiene un máster en Estudios de la Diferencia Sexual por la Universidad de Barcelona, es maestra en Derecho por la Universidad de Harvard.
Es doctora en Derecho por el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM.
La comisionada nacional de búsqueda fue abogada de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
Trabajó como secretaria de Estudio y Cuenta en la ponencia del ministro Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Colaboró en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
Fue vicepresidenta de Integridad Institucional del Banco Mundial.
A partir de que al diputado federal le señalaran que la mujer a la que se refería como “señora” es doctora en derecho, el panista comenzó a nombrarla como “la señora doctora”.
“El tema de los litigios mediáticos de la señora doctora yo no lo entiendo ni lo comparto, es una autoridad que viene a estar señalando a los guanajuatenses, a las autoridades, pero no veo su aportación”.

Incluso, Jorge Espadas acusó a Karla Quintana de intentar distraer a la opinión pública de los que, consideró, son los graves problemas de Guanajuato como los recortes presupuestales.
“Mientras nos estamos distrayendo en notas de si le dieron información o no a la funcionaria, en México nos estamos debatiendo recursos… Así de eficaz es el circo que nos monta Andrés Manuel López Obrador y en el que estamos metidos, no estamos viendo los graves problemas”.
A los dichos del diputado federal se sumó el alcalde de Cortazar, Ariel Corona, quien aseguró que la presencia de la comisionada nacional de búsqueda en la fosa de la comunidad Cañada de Caracheo fue para dar “show mediático”.
El alcalde confirmó que no ha pedido información a la Fiscalía de los hallazgos en la comunidad que pertenece al municipio que gobierna porque “no somos autoridad competente”.
Buscadoras cansadas de promesas
En respaldo a Karla Quintana Osuna, familiares de personas desaparecidas reconocieron y agradecieron a la funcionaria federal por elevar los reclamos que desde los diferentes colectivos han hecho a la Fiscalía General del Estado y al gobierno de Diego Sinhue Rodríguez Vallejo, sin tener respuesta.
Las personas entrevistadas por POPLab señalaron que, a pesar de la insistencia de las familias por obtener información, la Fiscalía mantiene total hermetismo sobre los hallazgos en Cortazar y el proceso de identificación.
Desde que se encontraron los primeros restos humanos en Salvatierra, Yolanda Ramírez Domínguez, la fiscal especializada en investigación de delitos de Desaparición Forzada prometió a los colectivos de búsqueda una mesa de identificación que se realizaría la semana que termina, pero la convocatoria no llegó, mientras la única respuesta que dio a quienes insistieron por diferentes medios tener el encuentro fue: “estamos trabajando”.

“Karla Quintana nos da el apoyo porque ella ve y refleja el dolor de las familias, es un derecho que tenemos a la información”, manifestó una madre que busca desde hace más de un año a su hijo.
“Ella ha sido nuestra portavoz. Aquí la Fiscalía es el actor principal en toda esta situación de los desaparecidos. Vemos que la Fiscalía no hace trabajos de investigación serios”, mencionó una mujer que busca a su marido.
“Les mandamos unas peticiones para mesas de identificación forense por lo que se ha encontrado. En la Fiscalía se sienten exentos, intocables, que nadie les debe exigir respuestas”, dijo una persona que lleva más de dos años buscando a su hermano.
“No ven el verdadero problema. Los panistas se han encargado de revictimizar a las familias”, compartió una mujer que ha trabajado en las búsquedas de campo con la esperanza de encontrar a su hermana.
“Nosotras agradecemos las declaraciones de Karla Quintana, que hace tan visible la mala comisión que hay en el estado. ¿Por qué la comisión estatal no hace los mismos reclamos?, en lugar de eso el comisionado de aquí sale a decir que hay comunicación con ellos (la Fiscalía), cuando ni siquiera a ellos les contestan de manera inmediata”, señaló una buscadora pionera en el estado para visibilizar el problema de desaparición forzada.

Otra de las coincidencias de los colectivos de búsqueda es que no hay garantías de un trabajo eficaz de identificación en las prometidas pruebas de ADN a familiares que no han presentado denuncias para cotejar con los resultados que arrojen los cuerpos hallados en las fosas clandestinas.
Mencionaron que existen carpetas de investigación donde no se han incluido los resultados de las pruebas de genética que ha hecho la Fiscalía a familiares, aunque los exámenes se realizaron desde hace meses.
Incluso, existen casos donde para la prueba genética se toman muestras a la mujer que busca a su esposo.
“En nuestro colectivo hay familias que supuestamente ya se hicieron el ADN, pero nada más se lo hicieron a la esposa, cuando el marido desapareció, pues obviamente no saldrá un margen de compatibilidad porque son diferentes los genomas”.
En los colectivos estiman que son al menos 1 mil familias las que durante los próximos días irán a dejar la prueba de ADN, aunque no han presentado denuncias por sus seres queridos desaparecidos.

Un año de lucha
Las escalinatas de la presidencia municipal de Irapuato fue el escenario donde decenas de familiares que tienen un ser querido desaparecido escucharon los relatos de las 5 familias que iniciaron el colectivo "A Tu Encuentro", uno de los primeros que surgieron en Guanajuato para exigir a las autoridades reconocer y atender el problema.
Todo inició en una Iglesia de Irapuato, donde se reunieron familiares de personas desaparecidas, para hacer un frente ante la revictimización protagonizada por las autoridades.

El colectivo que inició con cinco familias, hoy suma a más de 200 integrantes que representan alrededor de 150 hijas, madres, padres, hermanos desaparecidos del municipio de Irapuato, Salamanca, Celaya, León, Apaseo el Alto, Villagrán, Cortazar, Uriangato, Salvatierra, Pénjamo y Cuerámaro.
Este domingo decidieron conmemorar el aniversario con una marcha que inició en la presidencia municipal de Irapuato, y aunque el plan original era terminar en el Parque Irekua, la opacidad con la que la Fiscalía General del Estado ha manejado los hallazgos de las fosas los llevó a cambiar la ruta para plantarse frente a la fiscalía regional B.
Rostro de las y los desaparecios
“Estoy en busca de mi nieta Johanna Ríos Blancarte que desapareció de su casa forzadamente. Un comando se la llevó el 27 de mayo de 2019 delante de su madre, quien a raíz del secuestro de su hija entró en crisis muy fuerte que la llevó a la muerte".
La voz de Martín, el abuelo de Johana, temblaba frente a las decenas de familiares de los desaparecidos, mientras hacía un esfuerzo para reclamar que la Fiscalía General del Estado activó la Alerta Amber para buscar a su nieta menor de edad 15 días después de que se presentó la denuncia, con la ayuda de la Fiscalía General de la República.
El testimonio de Martín fue solo uno de las decenas de historias que tienen familias de Guanajuato.

Violentamente desaparecen a mujeres en Irapuato
En el municipio de Irapuato existe el reporte de al menos 15 mujeres y una menor desaparecidas en lo que va de este 2020, al menos siete de ellas han sido sacadas de sus viviendas, de acuerdo al reporte de “Desaparecidos Irapuato” en Facebook.
Marjorie Molina Ferrer de 45 años de edad desapareció el 1 de noviembre, cuando hombres la sacaron de una fiesta contra su voluntad en la avenida 18 de Agosto.
Daniela Gabriela Villagómez Martínez de 26 años de edad desapareció el 30 de octubre. Hombres armados irrumpieron en el restaurante-bar La Barra Central donde dispararon a quemarropa a dos clientes y se llevaron a la joven a la fuerza.
Brenda Rivera Borja de 43 años de edad desapareció la noche del 5 de marzo, luego que hombres armados ingresaron a su vivienda ubicada en la colonia Galaxias el Naranjal y la privaron de su libertad.

El 30 de octubre, Juana Villafuerte Prieto desapareció, después que hombres armados ingresaron a su casa ubicada en la colonia Galaxias el Naranjal. Ella se encontraba con otras dos mujeres que también fueron privadas de su libertad.
Maricela Robles Bravo de 51 años de edad desapareció la madrugada del 28 de enero cuando hombres ingresaron violentamente a su casa en la colonia El Copalillo y se la llevaron.
Jazmín de Jesús Nava Rayas de 22 años de edad desapareció el 23 de octubre, después que salió de su casa y se dirigió a trabajar a una empresa de seguridad en el parque industrial Castro del Río.
Nancy Azucena Garcia Ramírez de 13 años de edad desapareció cuando salió una tarde de su casa ubicada en la colonia Los Fresnos para dirigirse a la tienda.
Ivette Castro Espinoza de 43 años de edad desapareció el 1 de octubre. Estaba junto con otros trabajadores de juegos mecánicos en el Inforum, propiedad del municipio, desde febrero cuando se suspendió la "Feria de las Fresas" por la pandamia del COVID-19.

Lidia Roxana Beisle Alegría de 36 años de edad desapareció el 30 de agosto de la colonia 12 de diciembre, dijo que iría con un conocido a un mandado y ya no regresó.
Fernanda Orozco Soto de 31 años de edad desapreció el 22 de junio de 2020. Trabajaba como Uber, iba en un Aveo modelo 2020, avisó a su familia por teléfono que transitaba sobre el bulevar Solidaridad para dejar un pasaje. Después de 10 días se encontró el vehículo, pero de ella nada se sabe.
Alondra Espinoza Carmona de 22 años de edad desapareció el 8 de marzo, ese domingo por la noche fue vista por última vez en la colonia Malvas Revolución .
Nancy Cecilia Montoya de 19 años desapareció junto con Pedro Adame Meza el 1 de abril, la madrugada de ese miércoles los vieron en la colonia Rancho Grande cuando se dirigían a una fiesta abordando un Uber.
Blanca Esthela Cervantes Flores de 31 años de edad desapareció el jueves 23 de enero. Fue vista por última vez en la central de autobuses de Irapuato.
Sara Fernanda Mendoza de 23 años de edad desapareció el 17 de enero, luego de salir de casa de su madre en la colonia Valle Verde.
Alondra Espinoza fue sustraída de su casa ubicada en la colonia Apatzingán.
Gema Daniel Zárate, originaria de Puerto Vallarta, llegó el 7 de octubre a la central de autobuses de Irapuato, venía de visita. Confirmó a sus familiares que ya estaba en la ciudad y luego se perdió contacto con ella.
Janeth Candelaria Morales Rosales de 28 años desapareció el 5 de noviembre. Salió de su casa en la colonia Apatzingán con dirección al IMSS de Irapuato.

Oportunismo político
En la marcha de este domingo el oportunismo político no se hizo esperar.
Irma Leticia González Sánchez, quien fue candidata de Morena a la alcaldía de Irapuato en 2018 y que ya manifestó la intención de volver a contender por el cargo, se hizo presente en la marcha.
González Sánchez fue militante priista, pero renunció al partido en 2018 cuando el instituto político le negó una candidatura y se unió a las filas de Morena. Contendió por la alcaldía y perdió, pero fue incorporada a la oficina de la Profeco.
Al cargo en el Gobierno Federal renunció hace unos días para buscar un cargo público el próximo año.
Luego de un año de lucha de las familias de las personas desaparecidas, Irma Leticia González se hizo ‘la aparecida’ al final de la marcha, argumentando que ahora sí apoyaría a las familias que la buscaron hace meses, pero que por el cargo que tenía en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador no había podido ayudar.
8 de noviembre de 2020, 15:52
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