Con información y fotos de Yajaira Gasca, Verónica Espinosa y Melissa Esquivias

Imágenes: Juan José Plascencia y Pinche Einnar

La Universidad de Guanajuato está manchada de sangre. Y no solo metafóricamente: la mañana de este martes, las escalinatas del edificio central, en la capital del estado, amanecieron pintadas de rojo. Con ese acto simbólico arrancó una jornada de protestas estudiantiles por el asesinato de Ángel Yael Ignacio, alumno de la UG en el campus Irapuato, a manos de un agente de la Guardia Nacional, el pasado 27 de abril.

Contingentes de varios municipios del estado se dieron cita en el emblemático edificio de la UG. Alumnos de las sedes Irapuato-Salamanca, León, Celaya-Salvatierra, se sumaron al de la ciudad capital para marchar por las calles con dos exigencias básicas, "Justicia para Ángel Yael" y "La Guardia Nacional fuera del Copal", es decir, fuera del llamado Polígono del Conocimiento, zona que comprende varias escuelas en el municipio de Irapuato, donde se perpetró el ataque.

Esto, en respuesta a la decisión judicial, el fin de semana, de que un primer agente de la GN detenido por el crimen fuera liberado por falta de pruebas y que un segundo elemento, un marino asignado a esta institución, haya sido inculpado.

Ahí se pidió a la Fiscalía General de la República asigne un fiscal especial que investigue el caso y se denunciaron los peligros de la militarización de la seguridad pública.

Aunque el personal de mantenimiento de la UG se apresuró a limpiar las escalinatas antes de la llegada de los estudiantes, la imagen ya se había comenzado a distribuir en grupos de estudiantes en Facebook y WhatsApp.

Esta es la tercera manifestación multitudinaria que organizan los estudiantes de la UG en los últimos días en el estado, a la cual se han sumado las autoridades universitarias, encabezadas por el rector general, Luis Felipe Guerrero Agripino. No obstante, también hubo reclamos en contra suya por tratarse presuntamente de sacar ventaja política del caso: “eres un fascista, hipócrita”.

Con sus consignas por las angostas calles de Guanajuato, las y los estudiantes dejaron en claro que el de Ángel no es un caso aislado, pues no es la primera vez que, de inicio, se criminaliza a los jóvenes.

Durante la protesta de este martes se recordó a Ana Daniela Vega González, estudiante víctima de feminicidio a fines de 2019 en la capital del estado, lo que dio origen al primer paro estudiantil en la UG.

En aquella ocasión, un primer comunicado de la universidad lamentaba la muerte de la joven calificándola como “egresada”, además de que se filtró la versión, por parte del gobierno municipal, de que había sido un suicidio. Solo las protestas de las comunidades UG y feminista obligaron a difundir sobre nuevas líneas de investigación, lo que concluyó casi un año después con una sentencia de 25 años contra su feminicida.

En la jornada de protestas de este martes también se mencionó a Edith Alejandra, que resultó herida de gravedad durante el ataque de la Guardia Nacional al vehículo donde viajaban cuatro alumnos de la UG el pasado 27 de abril.

“Vuela enjambre” por la pérdida de una abeja

Esta mañana, luego de unas palabras de agradecimiento de la madre de Ángel Yael -alumno de Agronomía en el campus Diciva de Irapuato- no solo por el apoyo, sino el arropamiento de la Universidad, esta nueva marcha post pandemia partió de las escalinatas del edificio central rumbo a otro punto neurálgico de la ciudad: la Alhóndiga de Granaditas.

La familia y amigos se ubicaron al pie del asta bandera, mientras el resto del contingente llenaba la explanada de la Alhóndiga con consignas como “Me quiero titular, me quiero titular, no quiero que le lleven mi cuerpo a mi mamá”.

Cientos de estudiantes vestidos con playera blanca acompañaron a la familia de su compañero en la exigencia de justicia por el asesinato de Ángel, de 19 años.

Ahí se realizó un pase de lista con un minuto de silencio, para estudiantes y egresados de la UG que han perdido la vida en circunstancias de violencia, listado que encabezó Ángel Yael Ignacio Rangel.

Posteriormente, la marcha se reanudó sobre la calle Juárez pasando frente al mercado Hidalgo, la plaza de la Paz, la Presidencia Municipal, el Teatro Juárez hasta dar la vuelta a la altura del Puente del Campanero y regresar al centro de la ciudad por la calle Cantarranas.

Al arribar nuevamente al edificio central de la Universidad de Guanajuato resonaba el grito persistente de “¡Autonomía, presente!”.

Críticas de la comunidad estudiantil

Horas antes de la concentraciones en Irapuato, León y Guanajuato capital, el grupo estudiantil autodenominado “Puercos de Choque”, difundió un posicionamiento en el que hizo un llamado a la comunidad y a la sociedad a “no olvidar” la complicidad y encubrimiento de la rectoría de la máxima casa de estudios en “casos de injusticia y abusos”, que han flagelado al alumnado.

El desplegado fue leído en las escalinatas del edificio central de la UG, donde también se hizo hincapié en el incumplimiento de los acuerdos pactados entre la comunidad estudiantil y el alcalde Alejandro Navarro, el gobernador Diego Sinhue Rodríguez, el fiscal estatal Carlos Zamarripa Aguirre y el rector Luis Felipe Guerrero Agripino.

El rector de la UG.

Este incumplimiento, según lo protestado en el megáfono, fue el motivo por el cual los estudiantes deslindaron al rector universitario de la marcha convocada por las distintas divisiones de la UG. Aunque la madre de Ángel Yael pidió a la comunidad estudiantil canalizar su coraje en el cumplimiento de sus metas, algo que ya no podrá hacer su hijo y defendió a Luis Felipe Guerrero Agripino, pues "Gracias al rector, yo he podido llegar hasta aquí”.

Tras reconocerles a los y las estudiantes que se cumpliera con la promesa de una marcha pacífica, la mamá de Ángel dijo que “hay que saber pedir las cosas”, tras lo cual pasó los micrófonos al rector de la UG, que fue recibido al grito de “fuera Agripino”, por lo que el académico abandonó las escalinatas sin rendir declaraciones a los medios de comunicación.

Cuando se pidió silencio, estos estudiantes gritaban “Exigimos ser escuchados y ni siquiera podemos hablar”, "No respetamos al rector, respetamos a Ángel". Tras eso, se dio lectura a un posicionamiento con el exhorto a la FGR para asignar un fiscal especial para el caso de Ángel y concluyó la manifestación.

Luego de esto, la comunidad UG de la capital del estado y el Grupo de Choque compartieron un comunicado en el que expresaron su respeto a los estudiantes de la División de Ciencias de la Vida y manifestaron su rechazo ante la acción institucional de “llenar las escalinatas de directivos y personal administrativo que no tenía intenciones genuinas”.

Los firmantes se deslindaron de haber cometido agresiones de ninguna índole y de la figura de Luis Felipe Guerrero Agripino, por utilizar el movimiento estudiantil “para favorecer su carrera política”.

"No sabía que la campaña de Agripino había comenzado": personal UG

Por otra parte, POPLab recibió comentarios de parte del personal universitario sobre la conveniencia para rectoría de "usar" la marcha por Ángel y la situación sobre la seguridad "para perseguir su siguiente escalón (ya sea la gubernatura o la fiscalía)."

"Que pinche abuso usar a los alumnos", mencionó un testimonio. Destaca que a las y los trabajadores de la universidad, se les pidió de manera institucional ir a trabajar este martes vestidos de blanco. "Nos dijeron «no es permiso» pero si quieren bajen, están en su derecho de protesta", "Yo por eso no bajé".

Refuerza en algunos la sensación de oportunismo político que el equipo de Guerrero Agripino trajera su propio fotógrafo, camarógrafo y dron, que la UG transmitió en vivo la marcha y que el rector estuvo rodeado de su directiva todo el tiempo, hasta que abandonó el lugar a causa de la rechifla.

Además, según testimonios recogidos entre estudiantes: "quería llenar las escalinatas de puro directivo", puesto que la transmisión se alcanza a escuchar que se dejen pasar solamente a directivos y padres de familia, estudiantes no. En el lugar se apersonó en primera fila incluso el “eterno” secretario de la Asociación Sindical de Trabajadores Administrativos de la Universidad de Guanajuato (ASTAUG), Víctor Jiménez Ramírez.

Recuerdan a las abejas que ya no están

"Nosotros los estudiantes somos la voz del pueblo", que exige justicia, fue parte del discurso que compartieron los participantes en la manifestación, que mencionaron también el miedo de salir incluso de sus casas.

Al regresar a las escalinatas de la UG, volvió a hacerse el pase de lista:

• Ángel Yael Ignacio Rangel
• Cristian Rey Granados Prado
• Cinthya Janira Ibarra Arellano, egresada
• Jesús Miguel Rodríguez Martínez
• Karla Guadalupe González Gómez
• Luis Fernando Vázquez Rodríguez
• Miguel Alejandro Chávez Razo
• Ana Daniela Vega González
• Ana María Vega González
• Andrea Sámano Aburto
• Francisco Cabrera Bermúdez
• Jorge Alberto Rodríguez Rocha
• José Cruz Castro
• Leticia Romero Olvera
• Miguel Ángel Catia Báez
• Andrea Sámano Nieto

Durante la marcha hubo actos solidarios de la población y de personal de la Facultad de Arquitectura e Ingeniería Civil, que repartieron botellas de agua a los participantes.

En tanto, un moño negro colgaba también sobre la puerta de la preparatoria oficial en la ciudad capital, mientras en otras escuelas de nivel medio superior de la UG, como la fachada de la prepa del Centro Histórico, en León, desde hace días muestra pancartas de repudio por la actuación de la Guardia Nacional en la zona de el Copal, en Irapuato.