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12/14/2025
Con todo y protocolo, UG y Fiscalía solapan a maestro violentador y abandonan a víctima

Con todo y protocolo, UG y Fiscalía solapan a maestro violentador y abandonan a víctima

Denuncia pasa por 3 titulares de la instancia universitaria que no acaba de cumplir los fines para los que se creó por exigencia de comunidad estudiantil; en ámbito penal se topa con carencia de asesoría jurídica e intención de FGE de archivar su caso

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    Con información de Yajaira Gasca

    "Tengo mis ideales muy fuertes y más por la situación que se ha estado repite y repite. Estoy con la idea de hasta donde esté en mis posibilidades si puedo esquivarlo a una muchacha más, se lo voy a esquivar": estudiante de la Universidad de Guanajuato (UG) violentada por Miguel Ángel Castro, profesor del departamento de Artes Visuales en el campus Guanajuato.

    A poco más de seis meses de que denunció ante las autoridades de la UG y de procuración de justicia la serie de violencias que ejerció sobre ella quien fue su profesor y luego pareja, decidió hacer público su caso por la falta de garantías para salvaguardar su integridad física.

    La Fiscalía General del Estado ha mantenido sin avances significativos la carpeta 50646/2022 que se abrió por la denuncia que presentó la joven en mayo pasado por los delitos de violación y violencia familiar. Lo último que una abogada le explicó es que podría no judicializarse su carpeta; es decir, mandar al archivo la denuncia contra Miguel Ángel Castro sin al menos haberlo llamado a rendir una declaración.

    Al exhibir su caso y con el presunto agresor en las calles, la joven solicitó a la Fiscalía de Guanajuato que se implementen medidas de seguridad porque la orden de restricción ya no la renovó el Ministerio Público.

    "Pido medidas de seguridad eficientes, que realmente me pudieran garantizar que no me va a pasar nada mínimo de aquí a que termine el proceso".

    Con recursos propios y el apoyo de su familia, la estudiante tuvo que recurrir a una abogada particular para la primera parte del proceso penal porque la Universidad de Guanajuato se negó a facilitarle el acompañamiento legal. Ahora está a la espera de que la Comisión Estatal de Atención Integral a Víctimas (CEAIV) le asigne asesoría jurídica victimal.

    Aunque, asegura, no es la primera estudiante que es violentada por Miguel Ángel Castro, sino que es una práctica recurrente del profesor generación tras generación, es la primera vez que es denunciado ante UGénero, el programa creado por la Universidad de Guanajuato tras darse a conocer la falta de protocolos para atender la violencia de género al interior de institución.

    Ilustración Pinche Einnar
    Ilustración Pinche Einnar

    Su caso lo conocieron tres titulares de UGénero, pero con las limitadas facultades que tiene el programa puesto en marcha por el actual rector general, Luis Felipe Guerrero Agripino, no solo fue revictimizada por una de las abogadas, sino que le han dicho que no pueden acompañarla en el proceso penal, solo brindarle asesoría jurídica y apoyo psicológico que también intentaron limitar a cinco sesiones.

    Para la estudiante de Artes que participó en el paro de diciembre de 2019 surgido por la inseguridad y las violencias contra la comunidad estudiantil, concretamente contra las mujeres estudiantes a manos de maestros, no funcionó la reestructuración de UGénero para facilitar los procesos.

    "Desde que llegas te dicen que no reciben como tal una denuncia porque son puros reportes, porque UGénero no tiene la facultad de tomar cartas en el asunto, solo reciben reportes. Dicen que lo más que pueden hacer es canalizar el caso a la Comisión de Honor y Justicia o en su caso a Recursos Humanos".

    Incluso, en entrevista para POPLab, compartió el trato que recibió de la entonces titular de UGénero que conoció de su caso: Karla Johana Núñez Sandoval, quien estuvo al frente del programa de agosto de 2020 hasta abril de 2022.

    "Muy fría y tajante me dijo: 'mira, esto pasó en tu relación, nosotros no nos podemos meter porque fue una relación personal'".

    Miguel Ángel es un hombre de 44 años que fue profesor de la joven a la que le dobla la edad.

    "Yo les dije que todo empezó en la escuela, tampoco es como que me lo topé en la calle. Mucha de la violencia fue en la escuela, pero al final una siempre termina perdiendo, y yo terminé perdiendo", dijo al recordar que su plan de vida incluía estudiar una maestría terminando la licenciatura, pero ahora duda que pueda concretarlo.

    Después de ser denunciado, Miguel Ángel comenzó a presentar incapacidades para ausentarse de sus funciones como profesor y así frenar el proceso en su contra al interior de la Universidad de Guanajuato. Hasta antes de que su caso se hiciera público, desde UGénero llegaron a decirle a la estudiante que por las incapacidades autorizadas al profesor "estaban atadas de manos".

    Sin embargo, hace unos días la nueva titular de UGénero, Luz María Velázquez Cárdenas, dio a conocer en un video difundido por las redes sociales del portal de noticias Impacto que el profesor fue separado, sin explicar cómo se concretó la salida de Miguel Ángel, después de al menos 15 años como profesor en la escuela de Artes.

    "Él ya no va a continuar en la UG, se separa completamente de la comunidad universitaria...Nosotras ya hicimos la parte que nos corresponde, invitamos a la Fiscalía a hacer la parte que les corresponde", comentó la titular de UGénero.

    La estudiante comentó que ha encontrado respaldo y acompañamiento en una de las colaboradoras de UGénero: María Magdalena Cruz Vázquez.

    Violencias

    Con atenciones y acercamientos "muy paternales", Miguel Ángel comenzó a buscar a su estudiante de segundo semestre y solo unos meses después le pidió iniciar una relación amorosa en 2019.

    "Para mí fue muy confuso porque era muy, muy paternal, y ya no supe cuándo empezó a ligarme. Fue muy rápido cuando me dijo que me estimaba mucho y si quería empezar una relación, la verdad le dije que sí", contó.

    La relación continúo durante la pandemia en 2020, y en esos meses la estudiante fue víctima de violación por parte del profesor, quien logró persuadirla haciéndola creer que había sido una relación consensuada.

    "Me dijo que no había sido una violación con mucha seguridad, yo como que lo bloquee", fue hasta meses más tarde que reconoció ese acto como una violación y fue consciente de otras violencias.

    "Me fui dando cuenta poco a poquito. Me di cuenta que mentía de forma sistemática, un año después fue cuando me di cuenta de la violación, un día que discutimos me lo confirmó pero no tenía planeado grabarlo ni nada".

    Narró que durante un mes vivió con él, tiempo en el que Miguel Ángel llegó a encerrarla en varias ocasiones una habitación aislándola después de una discusión. "Solo viví un mes porque fue lo que aguanté porque fue mucha, mucha violencia, de estar él tomando (alcohol) todos los días... Tuve que llamar varias veces a la policía".

    Miguel Ángel, fotografía especial
    Miguel Ángel, fotografía especial

    La violencia psicológica estuvo presente en la relación de dos años. Para manipularla le decía que se suicidaría, incluso, dijo, el profesor llegó a tomarse pastillas y dejaba de responder a sus llamadas. "Una vez se cortó mi nombre. Nos peleábamos y al otro día llegaba todo cortado", contó.

    "Tiene casi 15 años dando clase en la Universidad, tiene esos 15 años teniendo relaciones con alumnas, han sido relaciones personales y de abuso", aseguró la estudiante que denunció la violencia.

    Compartió que en los momentos de mayor tensión en la relación cuando vivió con él, ella le dijo que estaba mal y pensaba en suicidarse. La respuesta que recibió de su pareja fue que él mismo le ayudaría a hacerlo.

    "Le dije directamente a Miguel 'ya estoy muy cansada, estoy viendo matarme', y me dijo: 'yo te apoyo en todo lo que tú quieras, yo sé las pastillas para hacerlo, la cantidad'. De por sí yo estaba mal, me puse peor".

    Apenas unos días después ella escapó de noche de la casa del profesor para viajar a su estado de origen, Chihuahua, pero antes hizo una parada en casa de una familiar donde intentó suicidarse.

    La joven mencionó que sus profesores y profesoras conocían de la relación y también que Miguel Ángel tenía antecedentes de relaciones violentas con estudiantes, pero nadie le advirtió nada. Los comentarios sobre los antecedentes del profesor llegaron después a través de compañeras y compañeros de otras generaciones.

    "Cuando empezaba a tensarse la relación me acerqué a maestros y todos al principio muy muy tajante me decían que no les correspondía, no sabían ni siquiera utilizar la plataforma de UGénero para denunciar. Son muy pocos los maestros de los que recibí una respuesta mínima de empatía".

    Medidas de la UG son simbólicas: víctima

    La falta de respuesta de las instituciones ante las que denunció los abusos de los que fue víctima, llevó a la joven a hacer público su caso, primero de manera interna a través de un video que proyectó en las aulas del departamento de Artes Visuales, acusaciones que llegaron a ser conocidas por la rectora del campus Guanajuato, Teresita Rendón Huerta, aunque desde mayo pasado acudió a la unidad de UGénero a denunciar al profesor.

    Contó que hace unas semanas, como parte de un proyecto académico, proyectó un video hablando de la violencia contra las mujeres, en el que incluyó su testimonio. El video se presentó ante estudiantes y algunos profesores.

    Un amigo compartió el video en los correos electrónicos de las autoridades universitarias del campus Guanajuato, lo que motivó a que la rectora Teresita Rendón Huerta la llamara a una reunión, en donde ella reprochó que las autoridades mantengan a un profesor que entre la comunidad es reconocido como violentador de estudiantes con las que entabla relaciones.

    "Es impresionante el miedo que le tienen algunos maestros en Artes porque en esos dos años ni mi directora, ni coordinadores, ni nadie se acercó a mí para advertirme todo lo que había hecho, porque tiene antecedentes muy densos".

    Expuso que su agresor, además de profesor, ha tenido cargos en la Asociación Sindical de Personal Académico y Administrativo de la Universidad de Guanajuato (Aspaaug). Incluso, se encontraron registros de que Miguel Ángel formó parte de la Comisión de Honor y Justicia de la asociación sindical a cargo de Claudia Lizbeth Reyes Montúfar.

    La secretaria general de Aspaaug con el rector general
    La secretaria general de Aspaaug con el rector general

    De acuerdo con la estudiante, su cercanía con los líderes sindicales le permitió conseguir incapacidades que fue extendiendo para que le pagaran su sueldo íntegro sin tener que estar en activo, para evadir la investigación en UGénero.

    La joven compartió que ante la rectora del campus Guanajuato recriminó que esperaron a que publicara el video sobre los riesgos que corre para poder tener un acercamiento con ella. "No hay riesgo académico de si me voy a graduar o no, sino que el señor está suelto. En algún momento tuve medidas de seguridad, como la carpeta se estancó ya ni siquiera me la renovaron, ya no tengo alguna orden de restricción".

    En cuanto a las medidas que tomó la UG, en su caso son inútiles porque aplican únicamente en la escuela y su agresor no va a las instalaciones. Las instrucciones son que el personal tiene que estar al tanto de su seguridad, pero recordó que estando dentro de la relación Miguel Ángel le confesó con nombre y apellido de al menos un intendente que la mantenía vigilada.

    "Me mandaron medidas simbólicas que son así como que tenga dos o tres maestros de confianza por si me siento insegura en la escuela me acerque a ellos y no sé qué puedan hacer, pero que me acerque a ellos".

    Entre los beneficios que tiene Miguel Ángel por estar agremiado a una asociación sindical, se encuentra la representación jurídica, mientras la estudiante no ha tenido el acompañamiento legal de la UG.

    La estudiante comentó que un día que fue a las oficinas de UGénero para conocer sobre los avances de su caso, le sugirieron irse a otro lado porque habían detectado que una de las abogadas del programa institucional también trabajaba en el despacho de abogados que defiende al profesor.

    "Me dijeron que se habían enterado hace poco, que estaban viendo cómo podían despedirla. Apenas me comentaron que ya la despidieron de UGénero".

    Cambios y limitaciones en UGénero

    Al presentar la queja ante UGénero, en el edificio central de la Universidad en Guanajuato capital, la acompañó su agresor, pero el personal del programa le pidió no estar presente. A partir de ese momento el profesor comenzó a meter incapacidades con el pretexto de irse a un anexo, lo que frenó la investigación porque no estaba en activo.

    "Dentro de su locura me violentaba y luego entraba en la actitud de 'quiero hacerme responsable', entonces yo le dije que fuera y testificara porque estamos conscientes que una como alumna no tiene casi poder por mucho que hagamos los reportes. Según él iba a ir a testificar ese día, pero lo corrieron de las oficinas, le dijeron que no podía quedarse allí".

    La joven recordó que su caso ha pasado por tres titulares de UGénero: Karla Jhoana Núñez Sandoval, Martha Daniela Hernández Salgado y Luz María Velázquez Cárdenas; en esta última es quien le ha brindado más apoyo en el proceso, incluso le sugirió buscar una beca para que pueda cubrir los gastos que genera el proceso legal o la atención médica.

    Karla Jhoana Núñez fue designada en agosto de 2020 por la Comisión de Igualdad de Género del Consejo General Universitario. Estuvo en el cargo menos de dos años, porque en abril de 2022 la UG anunció su salida y el nombramiento de Martha Daniela Hernández Salgado, quien estuvo en el cargo hasta septiembre. El cargo lo dejó para estudiar un máster en Estudios de la Mujer y Género en Europa.

    Sin consenso de la comunidad universitaria, se presentó a Luz María Velázquez Cárdenas como la nueva titular del programa institucional.

    Luis Felipe Guerrero Agripino. Fotografía especial
    Luis Felipe Guerrero Agripino. Fotografía especial

    En un año UGénero ha visto a tres titulares, pero se mantienen limitantes en el reglamento como la imposibilidad de acompañar a la víctima en el proceso legal si decide denunciar a su agresor.

    "No me servía de nada ir a su asesoría legal si en esa asesoría me decían que no me podían ayudar, de hecho era hasta revictimizante", señaló la joven estudiante.

    A través de una respuesta vía acceso a la información pública la Universidad de Guanajuato informó que en los seis años que lleva UGénero se le han destinado al programa cerca de 5 millones de pesos, aunque actualmente el área registra únicamente a nueve personas trabajando en el programa, todas ellas por contrato con salarios mensuales que van de los 16 mil hasta los 24 mil 498 pesos que percibe la titular.

    UGénero fue creada en 2017, después de que se evidenciara la falta de protocolos para atender a las estudiantes violentadas por profesores con el caso de Julio César Kala. En los seis años se han destinado 4 millones 943 mil 381.98 pesos.

    Por parte de la Universidad de Guanajuato se le ha ofrecido únicamente la asesoría jurídica, no el acompañamiento ante el Ministerio Público, y aunque quisieron limitar las sesiones de terapia psicológica, finalmente por iniciativa de la terapeuta de UGénero sigue recibiendo la atención.

    "Una de las cosas que está super mal es que la psicóloga solo te puede dar cinco sesiones, como me explicaron es que la psicóloga solo me podía atender en cinco sesiones, pero la psicóloga me ayudó para extenderlo y ahorita llevo acompañamiento y es de calidad", comentó la estudiante de Artes.

    Fiscalía pretende dar carpetazo

    La joven no tiene actualmente quien la acompañe en el proceso legal que sigue en contra de Miguel Ángel. Se quedó sin la abogada particular que había contratado, pero antes de que ella dejara de representarla pidió la carpeta de investigación y advirtió que la agente del Ministerio Público a cargo del caso, Alejandra Victoria Merino, pretende archivar el expediente.

    Contó que quien fue su abogada le explicó que para la agente del Ministerio Público había inconsistencias en las pruebas que habían presentado. Una de esas pruebas fue un test psicológico que le realizaron a la estudiante para medir el daño psicológico que le habría generado la relación con Miguel Ángel.

    Profesor, presunto agresor. Fotografía especial
    Profesor, presunto agresor. Fotografía especial

    "Me explicaron que hay tres categorías: poco daño, mucho daño y descalificado, a mí me descalifican porque yo tenía antes afectaciones y como no llegué a la cita llorando y cortándome, lo desestimaron".

    Le propusieron que se sometiera a una nueva valoración médica, una que pagara ella misma, pero no cuenta con los recursos económicos para poder solventar el acompañamiento jurídico y las nuevas valoraciones.

    "Informé a UGénero de la nueva valoración, pero en algunas cosas UGénero me dice que no se puede meter: 'es tu denuncia, acá está la nuestra'", son algunas de las respuestas que ha tenido del programa institucional de la Universidad para la atención a la violencia contra las mujeres.

    Mencionó que desde hace dos meses la enviaron a las oficinas de la Comisión Estatal de Atención Integral a Víctimas (CEAIV) para que le asignaran un asesor jurídico víctimal, pero sigue sin tener respuesta de la instancia que está rebasada en la atención a víctimas por el limitado equipo y los miles de casos que la Fiscalía General del Estado le envía desde que dejó de dar la asesoría jurídica.

    "Un señor en la CEAIV me dijo que no sabía quién estaba llevando el caso, que lo iban a revisar, que luego me llamaban. No me llamaron y estuve molestando hasta que me dijeron que solo tenían seis abogados para todo el estado, y que su dinámica no es que un solo abogado agarre la carpeta, sino que la rolan entre todos y ya que ellos me avisaban, pero que estaban muy llenos de trabajo".

    Además de todo el proceso que ha tenido que seguir en busca de justicia por los abusos y agresiones que recibió de quien fue su profesor y pareja, la joven de 22 años sigue con sus clases para poder graduarse el próximo semestre.

    En la última visita que hizo al Ministerio Público pretendieron notificar del no ejercicio de la acción penal a Miguel Ángel, pero ella se negó a firmar la notificación, a la espera de que pueda ser asesorada para seguir con el proceso legal.

    "Que lo lleven a audiencia porque la carpeta está bien armada, tengo testigos entre amigos y personas de la Universidad", pidió a la Fiscalía de Guanajuato.

    22 de noviembre de 2022, 14:57

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