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Identifican a Salvador Hernández, ex funcionario de Agripino y nuevo Secretario General de UG, como responsable de agresiones a abejas
Acuerdan paristas y autoridades universitarias entrega de la rectoría general; promete Claudia investigación, pero se niega a destituir al que fuera secretario de Gestión y Desarrollo en la anterior administración
Salvador Hernández Castro, secretario general y brazo derecho de la rectora de la Universidad de Guanajuato, Claudia Susana Gómez López, fue identificado por los estudiante en paro como el principal operador de movilizar a alumnos y administrativos que los encapsularon y privaron de su libertad el 12 de septiembre en el edificio central. En ese momento ocupaba la Secretaría de Gestión y Desarrollo de la institución encabezada por Luis Felipe Guerrero Agripino.
Esto lo señalaron de manera reiterada durante la reunión que sostuvieron con la nueva rectora general, en la que se acordó la conclusión del paro y la desocupación de la Rectoría General.
Hernández Castro fungió como Secretario de Gestión y Desarrollo durante la administración de Luis Felipe Guerrero Agripino, y el pasado viernes fue nombrado por Claudia Susana Gómez como secretario general. Esto después de que ella tomó protesta oficialmente como rectora general de la Universidad de Guanajuato, el miércoles 27 de septiembre.

El paro estudiantil en el edificio central terminó a 22 días de su inicio con la entrega de las oficinas de la rectoría y el acuerdo de que se iniciará una investigación administrativa en contra de Salvador Hernández, el segundo funcionario más importante de la máxima casa de estudios.
Junto a él, fueron referidos tres funcionarios más que también deberán ser investigados y destituidos de sus cargos si se comprueba que intervinieron en diferentes hechos: Rodrigo Guadalupe Nájera Trujillo, director de Comunicación y Enlace; Elías Lira Mares, jefe del Departamento de Seguridad y Jesús Arellano Gómez, secretario académicos de la División de Derecho, Política y Gobierno.

Pero la protesta estudiantil aún no termina. En la Escuela de Artes Escénicas, Visuales y Música ubicada en Marfil, estudiantes tomaron la Rectoría de Campus y advirtieron que no la entregarán hasta que se cumplan los acuerdos del pliego petitorio, ya entregado a las autoridades universitarias.
Cierra Movimiento capítulo de resistencia: “esta lucha se ha dado a través del amor”
“La reciente movilización ha funcionado y recalcado una y otra vez la necesidad de organización comunitaria, que solo puede ser lograda de manera horizontal, transparente y pacífica. Esta lucha se ha dado a través del amor y las ideas que coexisten en la comunidad universitaria que a su vez forja parte del carácter del tejido social en el que vivimos. Convivir de manera activa en comunidad nos ha mostrado que otras formas de hacer la paz y crecer son posibles”.
A través de esa reflexión lírica, fue como estudiantes en resistencia en la Rectoría General de la Universidad de Guanajuato declararon la desocupación de las oficinas y las entregaron a la nueva rectora general.
El acto de entrega ocurrió a las 2 de la tarde, horario acordado un día antes en un diálogo entablado entre la rectora y los integrantes del Colectivo Movimiento Colmena, el cual duró casi tres horas.

Durante a la reunión se plantearon los cinco puntos del pliego petitorio: el cumplimiento de los pliegos de otras sedes universitarias y reuniones mensuales para darles seguimiento; garantías de democracia, transparencia, rendición de cuentas y máxima publicidad dentro de los órganos de gobierno de la universidad; no represalias contra los integrantes de la protesta; preservación de las intervenciones (murales) realizadas en el edificio; investigación de los funcionarios a los que se les señaló por la represión ocurrida el 12 de septiembre y resolución de estas mismas transgresiones en la Comisión de Honor y Justicia y el Consejo General Universitario.
El día previo a la entrega de la rectoría estos puntos fueron presentados y acordados, aunque sólo dos de ellos estuvieron a negociación, el relacionado con la memoria de la movilización y el relacionado a las investigaciones de los funcionarios.
Y es que inicialmente, integrantes del Movimiento Colmena pidieron la destitución de los cuatro funcionarios involucrados con la represión que ocurrió al segundo día del paro: Salvador Hernández Castro, actualmente secretario general, Rodrigo Guadalupe Nájera Trujillo, director de Comunicación y Enlace; Elías Lira Mares, jefe del Departamento de Seguridad y Jesús Arellano Gómez, secretario académicos de la División de Derecho, Política y Gobierno.
La rectora Claudia Susana Gómez se negó a conceder este punto, al referir que hay una investigación en curso y que como servidores públicos deben tener la garantía del debido proceso. Aseguró que al final de las investigaciones y en caso de resultar responsables, “tomaré la decisión correspondiente”.

Alumnas y alumnos insistieron sobre la destitución o separación temporal de los funcionarios de sus cargos, pues el viernes la rectora hizo los nombramiento de sus colaboradores cercanos y Salvador Hernández fue designado secretario general. Esto a pesar de que el antecedente sobre su intervención en la privación de la libertad de los estudiantes ya era un asunto público y existen denuncias penales presentadas por este motivo.
El acuerdo fue agilizar las investigaciones administrativas y esperar su resolución para la toma de decisiones. Estas negociaciones fueron encabezadas principalmente por la directora de Mediación y Conciliación de la universidad, Jessica de los Ángeles Delgado Rayas y la abogada general, Ileana Alejandra Bernardino Cruz. El papel de la rectora fue más presencial.
Sobre la conservación de la memoria, el acuerdo fue permitir a los integrantes del movimiento definir cuáles serían las intervenciones que desearía que permanecieran, ya que la universidad ofreció crear una memoria fotográfica y tenerla de manera permanente en una galería de exposiciones.
El paro universitario comenzó el 11 de septiembre tras la designación de Claudia Susana como rectora general por parte de la Junta Directiva, en un proceso desaseado y poco transparente. Estudiantes de diversas sedes se reunieron en la Plaza de San Roque y después de un largo diálogo decidieron marchar hacia el edificio central.

En el edificio determinaron tomar las oficinas de la Rectoría General. El mismo día, personal de seguridad e incluso hombres no identificados como trabajadores de la institución intentaron expulsarlos.
Al día siguiente, el 12 de septiembre alumnos de la División de Derecho se presentaron en el edificio para realizar una supuesta limpieza de las consignas realizadas en el lugar. Este día, el secretario de Gestión y Desarrollo, Salvador Hernández, convocó a alumnos a participar en esta movilización.
Esto terminó en el encapsulamiento de los integrantes del Movimiento Colmena y la privación ilegal de la libertad de este grupo por casi siete horas. La toma de la Rectoría tuvo una duración de 22 días.
Termina movilización en Rectoría General, pero continúa en Artes
De manera paralela, en la Escuela de Artes Escénicas, Visuales y Música, perteneciente a la División de Arquitectura, Arte y Diseño, el paro que aparentemente terminaría con la firma del pliego petitorio por parte de autoridades universitarias continuará de manera indefinida.
Alumnas y alumnos de esta sede citaron a las autoridades a las 15 horas para la firma del pliego petitorio, en el que se incluyeron demandas relacionadas con sanciones a profesores denunciados por acoso, artículos de higiene y el incumplimiento en la conclusión del edificio, situado en el mismo lugar en donde actualmente está la División de Ciencias Económico Administrativas (DCEA).

La rectora general acudió a la cita, escuchó el pliego y lo firmó, pero no emitió una postura al respecto, lo que causó desconcierto en la comunidad estudiantil. Aunado a esto reprobaron la ausencia durante el acto de la rectora de Campus, Teresita Rendón Huerta Barrera y de la directora de la división, Gloria Cardona Benavides. Extraoficialmente se sabe que esta última permanece fuera del país; viajó a Francia supuestamente a impartir una plática en la Universidad de Lyon.
Esto provocó que los alumnos se movilizaran y decidieran tomar las oficinas de la Rectoría de Campus y también la sede de Artes, en donde toman clases estudiantes de artes y música.

La rectora de Campus se presentó momentos después de que esto ocurrió para ofrecer diálogo a las y los alumnos, pero ellos acordaron permanecer en el lugar hasta que comiencen a concretarse los acuerdos del pliego petitorio. Desde la Rectoría General no hay información sobre cómo se manejara la situación con esta sede.
Perfiles afines al agripinismo acompañan gestión de Claudia
El viernes 29 de septiembre, la rectora general informó en un comunicado sobre el nombramiento de cuatro funcionarios que conformarán su equipo de trabajo. Graciela María de la Luz Ruiz Aguilar, rectora del Campus Celaya-Salvatierra, fue nombrada como secretaria de Gestión y Desarrollo.
Durante el proceso de designación de la persona titular de la Rectoría General, Graciela sustituyó a Luis Felipe Guerrero Agripino como presidente del Consejo General Universitario cuando se excusó a ser señalado por los tres rectores de campus Teresita de Jesús Rendón Huerta Barrera, del Campus Guanajuato; Carlos Hidalgo Valadez, del Campus León y Armando Gallegos Muñoz, del Campus Irapuato, de interferir en el proceso.
Graciela también fue la única de los rectores de Campus que mostró su apoyo a Claudia Susana Gómez, identificada desde que se hicieron públicas sus intenciones como “la candidata del rector”.

Édgar René Vázquez Gónzalez, secretario particular de la rectora, era titular del área de Recursos Humanos durante el más reciente período de Luis Felipe Guerrero Agripino. Es esposo de Graciela Silva Gómez, quien es la coordinadora administrativa de la Rectoría General.
José Eleazar Barboza Corona, investigador designado como secretario académico es una de las personas que firmó la carta entregada a la Junta Directiva acusando plagio de la rectora de Campus Guanajuato, presentada en el Consejo General por j. Merced Rizo Carmona, director del Nivel Medio Superior.

La mano derecha de Claudia Susana es Salvador Hernández Castro, secretario de Gestión y Desarrollo con Luis Felipe Guerrero Agripino y actualmente titular de la Secretaría General.
La rectora fue cuestionada en entrevista sobre el nombramiento de funcionarios de segundo nivel, ella informó que el tema se está analizando y que los perfiles se darán a conocer en próximos días.
3 de octubre de 2023, 14:18
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